Icono del sitio aviNews, la revista global de avicultura

“De la Granja a la Mesa”: Es hora de hacer caso a los datos disponibles

Escrito por: INPROVO
PDF

Todos los actores de la cadena de suministro alimentario respaldan los principios fundamentales de la estrategia «De la granja a mesa» y coinciden en que se precisan mejoras continuas y significativas para aportar un planteamiento más sostenible a nuestros sistemas alimentarios. Sin embargo, varios estudios sobre la estrategia «De la granja a la mesa» recientemente publicados señalan que aplicar las metas que se proponen en su estado actual traerá consigo un coste elevado para los agricultores de la UE y afectará a la viabilidad misma de todo el sector agroalimentario europeo.

Ya ha pasado el momento de transmitir mensajes políticos sobre esta estrategia y ha llegado la hora de analizar los datos de que disponemos actualmente. En los últimos meses se han realizado diversos informes y estudios para intentar evaluar y medir los efectos de las metas que fijó la Comisión Europea al presentar la estrategia «De la granja a la mesa» y la estrategia sobre Biodiversidad en mayo de 2020.

Los distintos estudios que han llevado a cabo el Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA), la consultora HFFA Research, el Centro Común de Investigación de la UE (CCI), la Universidad de Kiel y la Universidad y centro de Investigación de Wageningen (WUR) respectivamente, concluyen que existen diversos efectos, contrapartidas y ángulos muertos significativos que los legisladores de la UE (y de otras partes del mundo) deben tomar en consideración urgentemente.

He aquí algunos ejemplos:

– El estudio del CCI pronostica que la reducción de entre el 40% y el 60% de las emisiones de GEI provenientes de la agricultura, que se espera gracias a la ejecución de las metas de la estrategia «De la granja a la mesa», provocará a su vez una externalización de la producción agrícola europea, y de sus emisiones, a países extracomunitarios.
– El estudio de la Universidad de Kiel concluye que Europea podría convertirse en un importador neto de alimentos, lo cual sería totalmente contrario al principio de autonomía estratégica abierta que propugnó la Comisión Europea durante la crisis de la COVID-19.
– El estudio del USDA, por su parte, llega a la conclusión de que las metas que se fijan en la estrategia «De la granja a la mesa» podrían poner en peligro la seguridad alimentaria de 22 millones de personas.

¿Por qué no se analizan estos datos en Europa?

Todos estos estudios, con metodologías diferentes, puntos de estudio diferentes y ciertas limitaciones, son complementarios. Pero todos llegan a la misma conclusión: La producción agrícola de la UE disminuirá, en algunas zonas y en determinados productos incluso drásticamente. A tenor del estudio más reciente de la Universidad de Wageningen (WUR), se espera una caída de la producción media de entre el 10% y el 20%, debido a los efectos acumulativos de las metas en cuestión, pudiendo ser incluso del 30% en el caso de determinados cultivos.

A partir de esas cifras, las organizaciones miembro de European Livestock Voice consideran que “Ha llegado la hora de que la Comisión Europea lleve a cabo una evaluación del impacto integral. El plazo de la estrategia «De la granja a la mesa» es inminente. Ocho años no son muchos en el sector agrícola. El tiempo apremia y necesitamos propuestas concretas para entablar un debate en profundidad sobre las opciones que escogemos: un debate que se sustente en los datos más rigurosos.”

Puede leer el comunicado completo, de fecha 12 de octubre, aquí

Imagen: Video de European Livestock Voice con el resumen de los resultados de los trabajos sobre el efecto de la estrategia Farm to Fork

PDF
Salir de la versión móvil