Contenido disponible en: English (Inglés)
La evaluación clínica de los lotes de reproductores pesados es una tarea crítica y compleja para los veterinarios avícolas debido a las numerosas interacciones que se producen bajo condiciones de campo entre las prácticas de manejo esenciales, las condiciones ambientales del galpón, la nutrición, la bioseguridad y la salud del lote.
Evaluaciones clínicas
Con frecuencia, las evaluaciones clínicas solo se llevan a cabo cuando hay un incremento significativo en la mortalidad diaria y/o una caída del porcentaje de producción o cuando otros indicadores clave del rendimiento, como el peso corporal o la uniformidad, no llegan a los estándares para la edad y la estirpe de los machos o hembras.
Desafortunadamente, la realización de las evaluaciones clínicas son en respuesta a problemas que ya han ocurrido
Actualmente, la industria del pollo de engorde se enfrenta a crecientes presiones para garantizar la salud y bienestar de los lotes y a las exigencias de minimizar el uso de antibióticos en la producción de animales destinados a consumo humano.
El siguiente enfoque describe una herramienta útil y proactiva para prevenir las pérdidas asociadas tanto a enfermedades infecciosas como a no infecciosas
Es bien conocido que existe una correlación significativa entre la tasa de mortalidad y la producción de huevos. Tal y como refleja la Gráfica 1, cuando la mortalidad aumenta, la producción de huevos disminuye. Datos obtenidos de lotes establecidos de reproductores –Ross 708– a las 65 semanas de edad demuestran que lotes con 170 huevos incubables (HI)/ gallina alojada (GA) o más tuvieron menos de 10% de mortalidad durante la fase productiva. En cambio, lotes con 145 HI*/GA* o menos tuvieron una mortalidad del 20% o más durante el mismo período.
Es lógico pensar que una mayor mortalidad conduzca a pérdidas, tanto en el valor de la gallina como en el número de HI/GA. La siguiente estimación demuestra el posible impacto económico de la mortalidad de las gallinas en una compañía con un stock de 500.000 reproductores pesados en producción:
- Un 5% adicional de mortalidad resulta en la pérdida de 25.000 gallinas con un valor de $14 USD/gallina, lo que asciende a unas pérdidas de $350.000 USD.
- Estimando una pérdida de 4 HI por cada 1% de mortalidad, una tasa de mortalidad adicional del 5% puede resultar en unas pérdidas totales de 20 HI para el cómputo total de reproductores.
- Asumiendo un valor de $ 0,19/HI x 20 HI x 500.000 gallinas, las pérdidas ascienden a $1.900.000 USD. Añadiendo las pérdidas potenciales en el valor de la gallina y de los HI, las pérdidas ascienden a $2.250.000 USD/año.
- Visitar las naves de las pollitas y de las gallinas para examinar los comportamientos de los lotes y buscar de signos clínicos de enfermedad
- Examinar los registros y, particularmente, las tasas de mortalidad, así como las tendencias a lo largo de todo el ciclo productivo de los lotes
- Realizar necropsias durante las visitas a las granjas –exámenes post-mortem– de aves sacrificadas y recientemente muertas en la granja
- Llevar a cabo encuestas de mortalidad periódicas y recopilar información sobre las lesiones y causas de mortalidad de las aves.
- Típicamente, estas evaluaciones requieren que aves recientemente muertas de diferentes edades y granjas de un área particular se lleven a una localización central en una fecha programada y en horario de mañana.
En la mayoría de casos, las lesiones identificadas durante los estudios post-mortem se relacionan con prácticas de manejo y no necesariamente con enfermedades infecciosas. Es importante que estas evaluaciones se lleven a cabo como parte de un trabajo de equipo para garantizar una buena comunicación entre los veterinarios y el personal de producción
Lograr unos buenos resultados con estas evaluaciones se traduce en la identificación de oportunidades y el establecimiento de prioridades a la hora de mejorar el bienestar, la salud y el rendimiento de los lotes. Tras identificar la principal causa de mortalidad, habrá que implementar medidas preventivas o correctivas.
Los reproductores pesados tienen una vida productiva de alrededor de 56 a 65 semanas, mientras que los pollos de engorde solo viven durante 4-7 semanas. Los problemas clínicos o enfermedades detectados en los reproductores pueden ser muy diferentes de los que se presentan en los pollos.
Es particularmente importante determinar tanto la presencia de lesiones específicas como detalles sobre el estado físico de las aves que puedan estar relacionados con:
- El manejo
- Plumaje
- Desarrollo esquelético
- Desarrollo de los órganos reproductivos
- Características sexuales secundarias
- Evidencias de un mal manejo durante la vacunación
Es muy recomendable contar con una báscula a la hora de realizar estas encuestas
Encuestas de mortalidad
Las encuestas de mortalidad, seguidas de reuniones para discutir los hallazgos y analizar los datos, proporcionan unas oportunidades únicas para fomentar el trabajo en equipo, además de contribuir a la educación y la capacitación del personal técnico y de producción.
Es recomendable realizar encuestas cada 3-6 meses o en cuanto el rendimiento del lote comience a cambiar de forma adversa.
Pautas para una encuesta de mortalidad efectiva:
- Es necesario contar con el instrumental adecuado (instrumental de corte, guantes, vestimenta y calzado, etc.) para llevar a cabo las necropsias y recolectar las muestras para su análisis de laboratorio en caso de que sea necesario –ver Figura 1–.
- El encargado de los lotes debe llevar las aves a un lugar adecuado, que no represente un riesgo de bioseguridad y que sea de fácil limpieza y desinfección tras las sesión de necropsia.
- Todas las aves deben ir debidamente identificadas con el nombre de la granja, el código numérico del lote, la estirpe, la edad, etc.
- Las aves normalmente son enviadas en cajas de cartón.
- Colocar adecuadamente la mesa de necropsias en un lugar con acceso a agua corriente.
- Contar con formularios para registrar los hallazgos encontrados durante la sesión y para su posterior análisis.
- Báscula y cámara digital.
- Métodos adecuados de recogida y eliminación de todas las carcasas.
- Trabajo en equipo – veterinarios, productores y personal técnico, deben coordinar sus funciones para facilitar el proceso y optimizar la recopilación de datos.
- Todo el personal involucrado debe seguir unos protocolos adecuados de bioseguridad –cambio de ropa y calzado– tras finalizar la sesión, evitando visitar otras granjas o plantas de incubación durante el mismo día.
- Si se envían aves vivas –destinadas a sacrificio– deberán sacrificarse mediante un método aprobado, teniendo en cuenta que no deben contemplarse dentro de la mortalidad normal
Es crucial contar con un sistema de registro exhaustivo y un sistema de análisis de datos capaz de generar información útil. Esto se puede lograr al registrar todas las lesiones encontradas, así como su frecuencia de aparición en los distintos sistemas orgánicos –respiratorio, esquelético, digestivo, reproductivo, urinario, piel y plumas, etc.–
Sugerencias a la hora de recopilar la información
- Información general –granja, edad, estirpe, sexo, peso corporal, etc.–
- Aspecto externo –sacrificado, deshidratado, lesiones por picaje, trauma, excesivo desarrollo muscular, etc.–
- Respiratorio –aerosaculitis, traqueítis, pulmones congestionados, etc.–
- Digestivo –lesiones orales, enteritis, coccidiosis, nematodos intestinales, tapones caseosos, hígado graso, etc.–
- Musculoesquelético –reacciones adversas a las vacunas, lesiones, osteomielitis, pericarditis, dermatitis, sinovitis, pododermatitis, etc.–
- Reproducción –oviducto quístico, postura interna, hiperovulación, prolapso, etc.–
- Metabólico –ascitis, tetania hipocalcémica, peritonitis, muerte súbita, hidropericardio–
- Urinario –uratos, riñones agrandados, gota, etc.–
- Otros –lesiones con aspecto tumoral, atrofia del timo y de la bolsa cloacal, etc.–
- Ausencia de lesiones significativas –ALS–
Una vez reunida la información de las encuestas, puede organizarse y presentarse de distintas formas para mostrar la frecuencia de hallazgos específicos en función de la edad, sexo, localización, órganos, etc.
Sistemas comunes de gestión de datos pueden emplearse para generar tablas o gráficas que reflejen los hallazgos más comunes –Figura 2– e identificar tendencias –Figuras 3 y 4– a lo largo del tiempo o tras aplicar cambios de manejo o programas de prevención de enfermedades.
Es muy útil comparar los pesos corporales individuales de las aves examinadas durante la encuesta teniendo en cuenta los estándares para la edad y estirpe específica. La Tabla 1 a continuación muestra que 65% de las aves necropsiadas tenían un peso corporal 10% (o más) inferior al estándar para su edad
Las encuestas de mortalidad son una herramienta útil para examinar periódicamente los lotes de reproductores pesados durante las fases de cría y producción. Estas encuestas permiten la identificación y categorización de la mayoría de las posibles causas de mortalidad relacionadas con los problemas de rendimiento y pérdidas económicas significativas. Las encuestas de mortalidad constituyen un procedimiento efectivo para evaluar la salud del lote y priorizar la implementación de medidas correctivas y/o preventivas destinadas a preservar la salud del lote y garantizar el bienestar y rendimiento de los animales.