«Los problemas clínicos relacionados con la coccidiosis suelen ser frecuentes en pavos, no obstante, puesto que el grado de lesiones es menos espectacular que en broilers, éstos pasan desapercibidos»
Las diversas especies de Eimeria asociadas a procesos patológicos en pavos son específicas de huésped y no presentan inmunidad cruzada entre ellas. El cuadro clínico se caracteriza por un proceso entérico, causado por las lesiones ocasionadas durante la replicación del parásito en el tracto gastrointestinal. La afectación del mismo desemboca en alteraciones de la digestibilidad y absorción de los nutrientes.
Los problemas clínicos relacionados con la coccidiosis suelen ser frecuentes en pavos, no obstante, puesto que el grado de lesiones es menos espectacular que en broilers, éstos pasan desapercibidos. Hay diversas especies que infectan los pavos, pero sólo 4 son patógenas y/o generan pérdidas económicas:
- E. melearimitis.
- E. adenoides.
- E. meleagridis.
- E. dispersa.
- E. gallopavonis ha sido encontrada en un bajo porcentaje de lotes.
Coccidiosis en pavos
Los signos más frecuentes de coccidiosis en pavos son diarrea, hematoquecia y/o melena -presencia de sangre en las heces-, anorexia y depresión. La recuperación es rápida, de modo que las lesiones pueden pasar desapercibidas durante la necropsia.
El impacto económico de la coccidiosis en pavos es causado por un incremento de la susceptibilidad frente a patologías secundarias de las manadas afectadas
El impacto económico de la coccidiosis en pavos es causado por un incremento de la susceptibilidad frente patologías secundarias de las manadas afectadas -deficiencias nutricionales, disbacteriosis…- y un empeoramiento de los índices productivos -mayor índice de conversión, pérdida de uniformidad de la manada…-.
Los pavos de todas las edades son susceptibles a la infestación, no obstante, a partir de las 6-8 semanas de vida hay cierta resistencia a la enfermedad. A partir de este momento, pueden sufrir pérdida de peso o afectación del rendimiento productivo. Más allá de las 8-9 semanas de vida la elevada morbilidad es muy elevada, no obstante la mortalidad no suele ser muy alta.
Tipos de Eimeria y lesiones que provocan
Monitorización de la Enfermedad
La monitorización de la enfermedad se hace de manera rutinaria mediante el control de los grados de lesión en el intestino, normalmente a los 28 días de edad. El sistema más habitual es el desarrollado por ANSES -French agency for food, environmental and occupational health safetyen Francia.
La monitorización es importante para:
- Conocer la severidad del proceso de coccidia.
- Identificar las especies implicadas.
- Establecer un link entre la manifestación del parásito observada en la granja y en la producción
Desarrollo de Inmunidad
En general, el desarrollo de inmunidad es un proceso complejo. Con Eimeria, el proceso es más complejo si cabe debido a las diferentes fases por las que pasa en su ciclo de vida. Cada una de las fases presenta un diferente grupo de antígenos al sistema inmune para ser reconocidos e inducir una respuesta.
La mayor parte del ciclo ocurre intracelularmente siendo la respuesta inmune más efectiva de naturaleza celular y no humoral
Aunque tanto la inmunidad local como la celular están estimuladas durante la coccidiosis, difieren en el grado de respuesta a la infección
El desarrollo de la inmunidad es también influenciado por el nivel de infección del parásito:
- En infecciones intensas el sistema inmune reacciona con una respuesta inmune humoral en el corto plazo.
- En infecciones de grado bajo, como las producidas por la vacunación, el sistema inmune reacciona con una respuesta celular que ofrece una protección más completa y a más largo plazo frente al parásito.
La relativa corta duración de este tipo de inmunidad requiere una exposición constante a un bajo nivel de recirculación de Eimeria para mantener un nivel de inmunidad protectivo.
Tratamientos Farmacológicos
Generalmente las moléculas utilizadas en broilers, compuestos ionóforos, son efectivas también en pavos. No obstante, la concentración efectiva y el nivel de toxicidad de las mismas son sensiblemente superiores en el caso de los pavos. Gran parte de los productores de pavos emplean de manera continuada coccidiostatos/coccidicidas administrados a través del pienso durante las 7-8 primeras semanas de vida.
Ventajas
- Debido a su acción bactericida/ bacteriostática, permiten una mejora de los índices productivos.
- Evitan el estrés inmunológico propio de la administración de vacunas.
Inconvenientes
- A largo plazo, su uso continuado comporta un incremento de las resistencias, tanto de la Eimeria spp. como bacterianas.
- A medio-largo plazo ello acarrea una disminución de la sensibilidad del parásito frente la molécula usada y un incremento de la virulencia de las poblaciones bacterianas y de protozoos que podamos tener en campo.
- Los niveles de toxicidad de algunos ionóforos en pavos son sensiblemente inferiores respecto a broilers -ej. Salinomicina provoca intoxicaciones si superamos 15g/TM-. La monensina y el Lasalocid son bien tolerados en niveles similares a los utilizados en broilers.
- Su uso suele estar restringido a las primeras 6-9 semanas de vida. Un desafío “tardío” de los animales, podría afectar negativamente al desempeño de la manada. • Su uso no está permitido en formas de cría alternativa -ecológicos-.
Tratamientos Alternativos
Es frecuente el uso de ácidos, aceites esenciales o probióticos como complemento a otras estrategias de control.
La inmunización se consigue mediante la exposición de los animales a una dosis baja y controlada mediante aerosol o gel de ooquistes de las especies de Eimeria consideradas como más patógenas a partir del día de vida. Al contrario de lo que sucede en broilers, las cepas de Eimeria usadas en pavos son cepas no atenuadas, también llamadas no precoces. Este tipo de vacunas consiguen un alto nivel de inmunidad porque inmunizan y son efectivas frente a todas las fases del ciclo de Eimeria.
Ventajas
- Inician la inmunidad al proveer una dosis baja inicial de ooquistes de una manera uniforme y controlada.
- Coste competitivo frente al uso de coccidiostatos/coccidicidas.
- El contacto controlado con los ooquistes vacunales estimula la inmunidad local frente al agente y permite desplazar las cepas de campo presentes en la granja.
- En caso de ser necesario tratar, los ooquistes vacunales son sensibles a las moléculas coccidicidas presentes en el mercado.
- Su uso está permitido en las producciones alternativas -ecológicas-.
Inconvenientes
- la replicación de ooquistes procedentes de vacunas vivas, pueden generar cierto “estrés” post vacunal a tener en cuenta durante el manejo de la manada con el fin de minimizar posibles interacciones con otras vacunaciones o prácticas en campo.
Puntos Clave para garantizar una correcta Inmunización mediante la Vacunación
Administración y Presentación
Para una correcta inmunización de las manadas es necesario que cada animal reciba su dosis correspondiente mediante una aplicación uniforme y homogénea de la solución vacunal. Actualmente, existen dos métodos diferentes de administración:
- Aerosol
- Aplicación en gel: «Gel droplet» o «Gel dispenser»
Aerosol
Aplicación de la solución vacunal en base acuosa mediante spray de gota gruesa.
Los ooquistes en medios acuosos tienden a sedimentar, por lo que para garantizar una distribución homogénea de los mismos en esta solución vacunal es necesario agitarla constantemente. Además, un tamaño de gota excesivo puede incrementar la humedad sobre los animales y por lo tanto disminuir su temperatura corporal
Aplicación en gel «Gel droplet» o «Gel dispenser»
Aplicación de la solución vacunal en suspensión en gel que evita la sedimentación de los ooquistes y permite que éstos permanezcan suspendidos durante un periodo de tiempo superior.
El hecho de presentar los ooquistes en gotas de gel estimula a los animales a su consumo
Esta característica favorece una toma vacunal uniforme y homogénea, y su presentación estimula a los animales a su consumo. Además, no implica un importante incremento de la humedad sobre los animales y por lo tanto su temperatura corporal no se ve afectada tras la administración.
Administración de las Vacunas
Una administración correcta y uniforme es crucial para garantizar la inmunización del mayor % de animales posible y minimizar el riesgo de una recirculación vacunal, -imágenes 4/5-. Tras una correcta vacunación es recomendable verificar la efectividad de vacunación chequeando el % de animales bien vacunados mediante la supervisión de lenguas teñidas por el colorante, -Imagen 8-. La administración en gel permite un tamaño de gota 10-15 veces superior al esperado en un aerosol convencional, y por lo tanto facilita la ingestión de los ooquistes por parte de los animales, -imagen 7-.
Como mínimo el 80-85% de los animales debe haber tomado la vacuna
Vacunación VS en la sala de incubación Recepción en Granja
La administración puede ser realizada tanto en sala de incubación como en granja. Hay que tener en cuenta que la replicación de los ooquistes vacunales se ve influenciada por la funcionalidad del tracto intestinal.
Es decir, si los animales tienen acceso al agua de bebida y pienso tras la vacunación, el proceso de inmunización se verá favorecido, ya que el tratamiento físico aplicado en la molleja y la acción de los enzimas intestinales facilitan la eclosión de los ooquisties y la liberación de los esporozoitos de su interior, permitiendo la colonización del epitelio diana. En el caso de someter a los animales a transportes prolongados ->20hentre la sala de nacimiento y granja es preferible administrar la vacuna durante la descarga en la recepción de los animales.
Manejo de Lotes vacunados
La inmunización se alcanzará tras varios ciclos de excreción-reingestión de los ooquistes y para ello debemos:
- Garantizar una humedad de la cama de aprox 25-35%. Humedades inferiores al 20% provocan un retraso en el proceso de esporulación de los ooquistes.
- Garantizar el contacto de los animales con los ooquistes excretados; evitar remover la cama durante los primeros 21d, y alojar los animales a una densidad suficiente.
Si desea leer el artículo completo, descargue el PDF ADJUNTO
Artículo editado y publicado en el libro «Monográfico especial coccidiosis» de agriNews en el 2015
PDF