El Consejo Mexicano de la Carne, ComeCarne, advierte sobre el impacto económico y en el abastecimiento alimentario tras la suspensión total de importaciones de pollo desde Brasil por un brote localizado de Influenza Aviar H5N1. La organización propone aplicar una regionalización sanitaria que permita mantener el comercio con zonas libres de la enfermedad, sin comprometer la sanidad ni la seguridad alimentaria en México.
Ante el brote de Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP) H5N1 detectado en Brasil, el Consejo Mexicano de la Carne, ComeCarne, propuso aplicar un enfoque de regionalización sanitaria en lugar de una suspensión total de importaciones avícolas.
- Esta estrategia busca proteger la sanidad animal en México sin afectar gravemente el suministro de carne de pollo, una de las principales fuentes de proteína para las familias mexicanas.
La medida responde al caso confirmado de IAAP en el estado de Río Grande do Sul, al sur de Brasil, una región que representa apenas el 11,5% de la producción avícola nacional brasileña.
A pesar de que el brote está localizado, el gobierno mexicano decidió suspender todas las importaciones de carne avícola procedentes de Brasil desde el 19 de mayo. ComeCarne considera que esta medida, aunque preventiva, podría tener consecuencias significativas para la cadena de abastecimiento y los consumidores.
SUSPENSIÓN TOTAL DE IMPORTACIONES: UNA MEDIDA CUESTIONADA
El 15 de mayo, el gobierno brasileño informó oficialmente a las autoridades mexicanas sobre la presencia del virus H5N1. En respuesta, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), a través del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), determinó suspender la importación de productos avícolas de todo Brasil de forma temporal, en lo que se evalúa la situación sanitaria.
Aunque ComeCarne reconoce la importancia de tomar medidas rápidas para evitar la propagación de enfermedades, considera que el enfoque debe basarse en criterios técnicos.
- Específicamente, aboga por aplicar restricciones solamente en las zonas afectadas por el brote, permitiendo que las regiones libres de H5N1 continúen exportando sin afectar la seguridad alimentaria de México.
RECONOCIMIENTO A SENASICA Y LLAMADO AL EQUILIBRIO
En un comunicado reciente, ComeCarne expresó su agradecimiento al SENASICA por haber facilitado el ingreso de embarques que ya estaban en tránsito al momento de aplicarse la suspensión. Estas acciones, señaló el organismo, han contribuido a mantener activa la cadena de suministro de productos avícolas, asegurando la disponibilidad de alimentos esenciales.
No obstante, la organización insistió en que es fundamental encontrar un equilibrio entre la protección sanitaria y la estabilidad del mercado.
Según ComeCarne, aplicar una regionalización sanitaria permitiría restringir únicamente las zonas afectadas por el virus, sin bloquear a todo el país exportador. Esta estrategia es común en el comercio internacional y permite tomar decisiones proporcionales al nivel de riesgo.
BRASIL: UN SOCIO CLAVE EN EL SUMINISTRO DE POLLO
Brasil es actualmente el segundo mayor proveedor de carne de pollo para México, con una participación del 36,7% del total importado. Durante 2024, México importó aproximadamente 213 mil toneladas de pollo brasileño, lo que representó un incremento del 22,6% respecto al año anterior, según cifras oficiales del gobierno brasileño.
Además, existen 61 plantas procesadoras en Brasil autorizadas para exportar a México, todas ubicadas en regiones libres de Influenza Aviar. Por esta razón, ComeCarne considera que el cierre completo de las importaciones de pollo representa una medida excesiva que podría generar escasez y un alza de precios en el mercado mexicano.
IMPACTO EN LA ECONOMÍA FAMILIAR Y LA INDUSTRIA
El pollo es la proteína animal más consumida en México, con un consumo per cápita de 38 kilogramos al año. Por tanto, cualquier interrupción en su abastecimiento tiene un impacto directo en la economía de las familias, especialmente las de menores ingresos. La falta de producto importado también afecta a miles de empresas mexicanas que dependen del suministro continuo de materia prima para la elaboración de productos cárnicos.
- ComeCarne concluyó que es posible proteger la sanidad nacional sin paralizar el comercio internacional. Aplicar un enfoque técnico, basado en la regionalización sanitaria, permitiría mantener la inocuidad de los alimentos, proteger al consumidor y garantizar la continuidad del abastecimiento en el país.
Fuente: Con información de Consejo Mexicano de la Carne, ComeCarne.