EL GOBIERNO APRUEBA EL PERTE AGROALIMENTARIO: FIAB considera insuficiente el presupuesto destinado a la industria alimentaria
Con una inversión pública de unos 1.000 millones de euros hasta 2023, el Gobierno aprobó el 8 de febrero el PERTE agroalimentario, que espera genere un impacto en la economía de unos 3.000 millones de euros.
Por su capacidad de arrastre en distintos ámbitos, se espera que favorezca la creación de nuevos modelos de negocio, oportunidades laborales y ahorro en el tejido productivo, las economías domésticas y los presupuestos públicos.
El proyecto se centra en tres ejes de actuación prioritarios:
1. Paquete de apoyo específico para la industria agroalimentaria, con el objetivo de mejorar sus procesos de producción, vinculados con su competitividad, sostenibilidad y trazabilidad de la producción de alimentos. Dotación: 400 millones de euros.
2. Medidas concretas para apoyar el proceso de adaptación digital y que se extienda a todos los agentes que forman parte de su cadena de valor (agricultores y ganaderos y sus cooperativas, pequeñas y medianas empresas de producción, transformación y comercialización). Dotación: 454,35 millones de euros.
3. Medidas específicas de apoyo a la innovación y la investigación para lograr un sector agroalimentario competitivo en todos los eslabones. Dotación: 148,56 millones de euros.
El PERTE, que cuenta con medidas gestionadas por los ministerios de Agricultura, Pesca y Alimentación; de Industria, Comercio y Turismo; de Asuntos Económicos y Transformación Digital; así como del de Ciencia e Innovación, va dirigido a propiciar la transformación de la cadena agroalimentaria e impulsar la modernización y digitalización del sector, su crecimiento económico y la cohesión territorial.
La industria alimentaria, representada en FIAB, valora positivamente las líneas de inversión del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) para el sector agroalimentario, aunque considera insuficiente la dotación económica prevista para la industria. “Creemos que, dado el peso de la industria española de alimentos y bebidas en la economía española, la cuantía asignada es insuficiente para transformar el sector”, afirmó Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB.
Confía en que el PERTE, en lo relativo a la industria, se vea complementado con una línea de ayudas directas que permitan esa definitiva transformación. Asegura que es muy importante que este PERTE haya confirmado el carácter estratégico del sector, y consideran muy positivo el modelo de gobernanza que apuesta por la colaboración entre organismos públicos y representantes del sector privado.