Resumen de casos del Consejo Técnico del CESAC 2018

En 2018 se analizaron 99 muestras por PCR con sospecha de hepatitis por cuerpos de inclusión, enfermedad causada por el Adenovirus aviar del grupo-I, de las cuales el 30,3% fueron positivas. Se realizó el genotipado mediante secuenciación de las muestras positivas detectando el serotipo FAdV-8b en el 50% y el serotipo FAdV-11 en el 36,7% de las muestras. El resto de las muestras positivas (13,3%) aún no se habían podido genotipar.

En 2017 se analizaron 43 muestras por PCR siendo positivas el 46,5%. En el 65% de las muestras positivas se genotipó mediante secuenciación el serotipo FAdV-8b y en el 35% restante el serotipo FAdV-11.

Tanto en 2017 como en 2018, la mayoría de las muestras positivas a FAdV-8b fueron de explotaciones ubicadas en la mitad norte de España y las muestras positivas a FAdV-11 fueron de explotaciones ubicadas en la mitad sur del país.

También se miró la frecuencia de casos según la edad de los pollos de engorde para conocer la proporción de casos según los días de vida del animal.

2017

• El 55% de los casos tuvieron lugar en pollos de menos de 21 días de vida
• El 30% de 21 a 30 días de vida
• El 15% de más de 30 días

2018

• El 42% de los casos se produjeron en pollos de engorde de menos de 21 días de vida
• El 46% entre los 21 y 30 días de vida
• El 12% en más de 30 días

Procedimiento

Siguiendo el programa sanitario del CESAC, a las 18 s/v (justo antes del traslado a puesta) se extrae sangre del lote para realizar un control rutinario donde el título medio ELISA de EA fue de 248, valor más bajo de lo esperado en unas aves vacunadas. Los animales no presentaban ni signos ni lesiones y se trasladaron a granja de producción sin problemas.

Observaciones

La granja de puesta estaba compuesta por 4 naves. El primer día de la semana 36 de vida se produjo una marcada caída de la puesta en la nave 1. Este descenso de la puesta duró unos 5 días. En las aves no se observó ningún otro signo clínico –sin alteraciones en los consumos ni la calidad del huevo, no aumentaron las bajas–. Cuando la nave 1 se empezó a recuperar, las otras 3 naves empezaron a cursar con el mismo problema, donde en una de las naves el peor día se llegaron a perder hasta 30 puntos del porcentaje de puesta.

Cuando se produjo el primer nacimiento de la puesta del momento de la problemática, no se observaron signos ni lesiones en la descendencia. Pero cuando estos pollitos llegaron a los 12 días de vida empezaron a presentar un cuadro nervioso con apatía, ataxia, temblores en cabeza y cuello, cayendo de lado con patas estiradas y una alta morbilidad y mortalidad (hasta un 35% de bajas). La duración del cuadro fue de una semana, después se volvieron a alcanzar unos valores técnicos normales.

En los pollitos del segundo nacimiento, el cuadro mencionado anteriormente tuvo lugar a los 7 días de vida, y ya en el tercer nacimiento fue cuando empezaron a darse casos de mortalidad embrionaria en los últimos días de incubación y el cuadro nervioso se iniciaba la primera semana de vida.

Se enviaron muestras de sistema nervioso central, músculo, corazón y páncreas de pollos de 15 y 21 d/v que presentaban el cuadro nervioso al Servicio de Diagnóstico de Patología Veterinaria de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) para realizar un estudio histopatológico.

Las lesiones que se observaron fueron las siguientes:

• Encefalitis no supurativa subaguda grave con cromatólisis central neuronal multifocal generalizada.
• Miositis y miocarditis linfoplasmocitaria generalizada.
• Pancreatitis linfoplasmocitaria.
• El cuadro lesional es característico de una infección por el virus de la encefalomielitis aviar.

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