BIOFILM: FACTOR CLAVE
La gestión inteligente de la bioseguridad es un factor esencial para obtener un máximo rendimiento en las explotaciones avícolas.
El agua forma parte del concepto global de alimentación, y habitualmente se consume el doble de agua que de alimento sólido.
Si el agua es de calidad deficiente, existe un alto riesgo para la salud de los animales y la productividad de la explotación se ve afectada, repercutiendo negativamente en el rendimiento de la misma.
Los índices zootécnicos pueden verse seriamente afectados como consecuencia del uso de agua de calidad deficiente.
La dilatada experiencia de Grupo OX en el ámbito del tratamiento del agua aporta numerosos datos que permiten demostrar que la inversión en el ámbito de gestión inteligente de agua resulta muy rentable a corto, medio y largo plazo. Los datos que se presentan en este artículo son ejemplos que permiten ilustrar este hecho.
El principal factor de riesgo en relación a la calidad microbiológica del agua es el BIOFILM.
El biofilm es la capa de materia orgánica que recubre el interior de los elementos que forman parte del sistema de almacenamiento y distribución del agua, y contiene en su interior gran cantidad de microorganismos potencialmente patógenos.
Por tanto, los biofilms son comunidades complejas de microorganismos que crecen inmersos en una matriz orgánica polimérica extracelular, que les permite adherirse a superficies.
Esta matriz generalmente está formada por exopolisacáridos, que constituyencanales por donde circulan agua, nutrientes y residuos.
- Se ha demostrado que los microorganismos que crecen embebidos en el biofilm son habitualmente mucho más resistentes que los microorganismos de vida libre.
- Se ha demostrado que el biofilm, ejerce un efecto protector frente a la desecación y la acción de desinfectantes y antibióticos, además de ofrecer mayor facilidad tanto para el acceso a los nutrientes como para el intercambio genómico.
Como consecuencia, los métodos habituales de desinfección o el uso de antibióticos se muestran a menudo ineficaces contra las bacterias del biofilm.
Esta resistencia se atribuye al “escudo microbiano” que confieren los biofilms formados por diferentes especies de microorganismos y a la gran producción de sustancias poliméricas extracelulares.
Además de este riesgo sanitario, la formación de biofilm puede intervenir en distintos procesos y reducir la vida útil de los equipos.
En los sistemas de almacenamiento y distribución de agua, la formación de biofilm no supone únicamente una diseminación continua de microorganismos a la red, sino que también puede obstruir el sistema, afectando a la capacidad de transporte de agua e incrementando el consumo energético.
Por todas estas razones, para llevar a cabo una gestión inteligente del agua, en las explotaciones avícolas es necesario implantar un protocolo de trabajo que garantice su control.
De forma general, se ha demostrado en numerosas ocasiones que el Hipoclorito Sódico no elimina el biofilm del interior de las tuberías y otros elementos del sistema de distribución de agua.
Además, la eficacia biocida de este compuesto clorado depende enormemente de los factores físico-químicos del agua, tales como el pH y la temperatura.
Con objeto de conseguir que el Hipoclorito Sódico sea eficaz, cuando el pH del agua es superior a 6,5 habitualmente es necesario añadir productos acidificantes, con el coste económico que ello conlleva.
A todo lo anterior hay que añadir que la utilización de productos clorados en el agua genera la aparición de compuestos tóxicos
tales como trihalometanos, cloritos, cloratos y percloratos. Por estas razones, el tratamiento inteligente del agua plantea la utilización de sustancias alternativas a la tradicional cloración.
PROTOCOLO INTELIGENTE DE TRATAMIENTO DEL AGUA
La gestión inteligente de la bioseguridad de toda explotación avícola debe incluir un protocolo eficaz de higienización del sistema de distribución de agua.
Se requiere en primer lugar llevar a cabo la limpieza y desinfección completa de depósitos y tuberías utilizando un biocida registrado para este fin que garantice la completa eliminación del biofilm.
En este sentido, desde Grupo OX se propone la utilización del producto OX-VIRIN® (formulado biocida 100% biodegradable
en base a peróxido de hidrógeno y ácido peracético estabilizados con el Núcleoespecífico OX-VI®).
Posteriormente, es necesario implantar un tratamiento en continuo del agua que garantice una máxima eficacia biocida, un residual constante de materia activa a lo largo de toda la línea de distribución de agua, y presencia cero de subproductos tóxicos. En este sentido desde Grupo OX se propone la utilización del producto OX-AGUA 2a GENERACIÓN® (formulado biocida en base a peróxido de hidrógeno estabilizado con el Núcleo específico OX-AE®).
La ESTABILIDAD es fundamental para garantizar la eficacia y la vida útil de los productos biocidas. Cuando los productos no están correctamente estabilizados, es necesario utilizar dosis muy altas de producto, y muchas veces los resultados no son los esperados.
Estos productos, han demostrado su eficacia frente a bacterias, virus, hongos, esporas e incluso protozoos y sus formas de
resistencia.
A continuación, se presentan los resultados obtenidos en un ensayo realizado en dos explotaciones integradas en una empresa líder europea de producción avícola de carne.
Gracias al tratamiento del agua implantado (limpieza y desinfección del sistema hídrico durante el vacío sanitario con OX-VIRIN®, y tratamiento en continuo del agua con OX-AGUA 2a GENERACIÓN®), en la primera explotación se observó una reducción significativa tanto de la mortalidad (que se situó en < 1%) como del gasto en medicamentos (que fue de 0 €/kg).
En la segunda explotación, la mejora observada también fue sustancial, ya que la mortalidad fue del 1,4% y el gasto en medicamentos de 0 €/kg.
Teniendo en cuenta estos datos, en cada una de las dos explotaciones donde se ejecutó el ensayo se estima un retorno de la inversión superior a 10.000 €.
CONCLUSIONES
La bioseguridad gestionada de forma inteligente no es un gasto, sino que es una inversión muy rentable a corto, medio y largo plazo. Para gestionar la bioseguridad de forma inteligente, hay que confiar en el asesoramiento de profesionales y utilizar productos biocidas con eficacia avalada, que estén perfectamente estabilizados.
Un tratamiento inteligente del agua que incluya una adecuación del sistema hídrico para eliminación del biofilm con OX-VIRIN®, y un tratamiento en continuo del agua con OX-AGUA 2a GENERACIÓN®, es de mayor eficacia que los tratamientos convencionales con Hipoclorito Sódico, aporta mayor seguridad y evita posibles enfermedades que puedan ocasionar graves
pérdidas económicas.
Los datos mostrados en el presente artículo ponen de manifiesto que el retorno de la inversión observado gracias a la implantación de sistemas de bioseguridad inteligentes adaptados a las necesidades específicas de cada explotación avícola, es muy interesante, ya que el coste invertido es notablemente inferior al ahorro económico que permite obtener en materia de mejora de índices zootécnicos.