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Almacenamiento del Huevo, tres áreas claves

Escrito por: Edgar O. Oviedo-Rondón - Profesor y Especialista de Extensión en Nutrición y Manejo de Pollo de Engorde en el Departamento “Prestage” de Ciencias Avícolas de la Universidad Estatal de Carolina del Norte (NCSU). Médico Veterinario Zootecnista por la Universidad del Tolima de Ibagué, Colombia.
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El almacenamiento de los huevos es una práctica común en incubación y sus efectos varían por la duración del mismo. Es un proceso natural que también las gallinas realizan y es necesaria por algunas horas para el desarrollo adecuado del embrión. Pero con el aumento en el uso de incubadoras de mayor capacidad de huevos e implementación cada vez más común de la incubación de una sola etapa incubar huevos almacenados por periodos prolongados, se hace más frecuentemente.

1.-COLECTA DE HUEVOS

2.-MANIPULACIÓN Y ALMACENAJE EN LA GRANJA

3.-TRANSPORTE A LA INCUBADORA

Adicionalmente, debido a las variaciones en la demanda por productos avícolas muchas veces es necesario que algunos huevos sean almacenados por más días. Este artículo tiene la intención de discutir algunas prácticas de manejo que pueden minimizar los efectos negativos del almacenamiento. También se discutirán detalles para disminuir problemas durante el transporte de huevos desde las granjas hasta la incubadora.

Errores en pequeños detalles relacionados con variaciones en temperaturas, humedades y especialmente de golpes sobre los huevos que afectan a la calidad física y microbiológica, y a la viabilidad de los embriones

ÉXITO EN LA INCUBACIÓN DE HUEVOS ALMACENADOS

Todos los detalles para tener éxito en incubación de huevos almacenados se inician desde la colecta del huevo, la manipulación y almacenaje en la granja y el transporte a la incubadora.

El proceso natural de incubación requiere que el huevo pase unas horas después de la postura en contacto con el ambiente para intercambiar gases, perder algo de humedad, y de esta manera preparar las condiciones físico-químicas de albumen, yema y cámara de aire para el desarrollo del embrión.

Se ha observado en varios estudios que entre 24 y 48 horas son necesarias para que la liberación de dióxido de carbono del huevo, cause que el pH del albumen aumente de 7 a 9,0 – 9,5 lo que facilita el posicionamiento del embrión, el desarrollo vascular y ayude a establecer mecanismos de protección eficaces contra microorganismos.

 

Cuando es absolutamente necesario iniciar incubación con huevos frescos se puede cambiar el ambiente con exposición a amoniaco (150-200 ppm) por 30 a 60 minutos para causar este cambio de pH en el albumen. Sin embargo, esto no garantiza que los embriones tengan un mejor desarrollo y sobrevivan.

En estudios controlados se han observado resultados positivos en incubabilidad y calidad de pollitos cuando se utiliza incubación de una sola etapa, mantener la temperatura de la cáscara muy cercana a 100 oF (37,8 ºC) durante toda la incubación y correcto pre-calentamiento (10-12 horas) antes de iniciar incubación con huevos puestos en el mismo día.

Lógicamente desde la puesta hasta el inicio de la incubación, incluyendo el pre-calentamiento, ya han pasado más de 16 horas.

Al momento de la ovoposición los embriones tienen la edad cronológica de 24 a 26 horas y se encuentran generalmente en un estado de blastoderma con 30.000 a 40.000 células.

Todo este desarrollo sucede en el oviducto de la gallina puesto que la fertilización ocurre 15 a 20 minutos después de la ovulación.

Se considera que el estado de gástrula avanzada o estado X a XI en la clasificación de Giladi y Kochav (1976) es el ideal para almacenar los huevos para evitar que sufran mortalidad celular (apoptosis), mortalidad embrionaria y se obtenga mejor incubabilidad.

EL PAPEL DE LA TEMPERATURA

El principal factor que comienza a afectar el desarrollo embrionario es la temperatura.

TRATAMIENTOS ANTES Y DURANTE EL ALMACENAMIENTO DE LOS HUEVOS

Existen varios posibles tratamientos para mantener la viabilidad del embrión y la calidad interna del huevo para posiblemente mejorar la incubabilidad y parcialmente mantener la calidad de los pollitos.

Estas técnicas y las prácticas comunes utilizadas en la industria se resumen en la Tabla 1. Sin embargo, resultados recientes de investigación y experiencias de campo cuestionan la eficacia de algunas de estas prácticas.

En la industria avícola actualmente la temperatura comúnmente utilizada para almacenaje de huevos por menos de 5 días es 20 a 23 ºC, y entre 18 a 19 ºC para huevos que se almacenan hasta por 10 días.

Solo se utilizan temperaturas de 16 a 18 ºC para huevos almacenados hasta 14 días y hasta de 14 ºC cuando se almacenan huevos por más tiempo. Sin embargo, la tendencia es utilizar los límites superiores para facilitar la sacada del cuarto de almacenamiento hacia las máquinas y evitar el “sudado” de los huevos o condensación.

Tabla 1. Tratamientos aplicados a los huevos fértiles almacenados para mejorar incubabilidad

 

Igualmente, huevos a temperaturas menores demoran más para ser llevados uniformemente a la temperatura de incubación en las máquinas si no hay un pre-calentamiento adecuado con buena ventilación.

Algunas empresas avícolas tienden a utilizar temperaturas de 23 y hasta más de 24 ºC para huevos que duran en almacenamiento 3 días o menos.

Pero 24 ºC está muy cerca de la temperatura en que la replicación celular continúa y si el embrión después del estado de gástrula avanzada (estado XIII) no encuentra temperatura y condiciones para continuar el desarrollo puede morir.

En todas las circunstancias o temperaturas que se usen en el almacenamiento, el detalle importante es evitar la condensación al sacar los huevos del almacenaje a un corredor o sala con mayor temperatura y humedad relativa, puesto que el aumento de humedad puede ayudar a que las bacterias y hongos ya presentes en la cáscara se multipliquen y puedan causar contaminación.

Se pueden tomar cuidados como tener un ambiente controlado en estas salas o simplemente usar las horas más frescas del día para ir aclimatando los huevos a la temperatura externa.

La humedad relativa entre 65 y 75% es adecuada para todo almacenamiento de huevos.

Es cierto que algunos estudios de investigación han mostrado que humedades más altas cercanas al 80-85% podrían mejorar incubabilidad de huevos almacenados por más de 14 días, pero hay que tener en cuenta que estos estudios fueron realizados con pocos huevos limpios, lo cual no es tan común en las condiciones comerciales.

El riesgo de contaminación con más alta humedad es un problema mayor que lo que se puede ganar en incubabilidad con una humedad relativa superior al 80%. Siempre es necesario tener ventiladores en los cuartos de almacenamiento para hacer que el aire se transmita a todos los huevos de manera uniforme.

Es importante evitar el exceso de humedad y tener un buen aislamiento térmico del ambiente de almacenamiento para evitar variaciones en temperaturas. El uso de luz ultravioleta indirecta especialmente en las entradas de aire ayuda a mantener el ambiente con bajas cargas microbianas sin tener que utilizar desinfectantes que necesitan del agua para ser rociados, lo que aumentaría más la humedad relativa.

SPIDES, CALENTAMIENTOS POR PERÍODOS CORTOS

Los calentamientos por periodos cortos (SPIDES por sus siglas en inglés) durante el almacenamiento son la práctica de manejo más efectiva para recuperar incubabilidad y calidad de pollito en huevos almacenados por largos periodos de tiempo.

Otras prácticas con alguna eficacia para este propósito son almacenar los huevos con la punta pequeña hacia arriba, embolsarlos, y hacer volteos durante el almacenamiento o mayor número de volteos durante la incubación.

Si la logística y el equipo disponible lo permiten es aconsejable aplicarlos.

TRANSPORTE DE HUEVOS A LA INCUBADORA

En el transporte de los huevos a la incubadora, los principales cuidados tienen que ver con evitar condensación, temperaturas más elevadas que las del cuarto del almacenamiento de huevos de la granja y la exposición prolongada al sol y frio externo.

Es importante limpiar y desinfectar el camión y el equipo que se utilice para mover los huevos antes de cada transporte.

Adicionalmente, el uso de empaquetamiento adecuado y cuidadosa dirección del camión para evitar mayores vibraciones debe ayudar a disminuir los daños mecánicos durante el transporte y manipulación de cajas.

El porcentaje de fracturas durante el transporte no debería ser mayor a 0,5% y con buen cuidado se consigue reducir a menos de 0,3% estos defectos de los huevos por transporte.

Con estos cuidados y prácticas de manejo se espera que la incubabilidad de huevos almacenados por períodos mayores a 4 días pueda llegar a ser similar a los estándares esperados.

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