Coccidiosis
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Uno de los principales retos a los que se enfrenta el sector, tanto a nivel nacional como mundial, es la prevención y tratamiento de diversas enfermedades entre las que se encuentra la coccidiosis. Las pérdidas causadas por dicha enfermedad se estiman en 5,2 céntimos por ave para un ave de 2 kg de peso corporal.
En España, la producción de carne de pollo supera el millón de toneladas y supone uno de los principales motores económicos de la ganadería española con un valor de producción de 2.333 millones de euros, lo que supone un 5.3% de la Producción Final Agraria.
Coccidiosis
La coccidiosis es una enfermedad causada por parásitos protozoarios del género Eimeria que invaden el tejido epitelial del intestino causando lesiones e importantes pérdidas productivas. El principal problema de la infección por coccidiosis es que es causada por más de una especie, atacando cada una de ellas a diferentes partes del intestino. En pollos broiler E. acervulina, E. maxima y E. tenella son las especies más prevalentes y graves de las 7 que se conocen.
Control de la coccidiosis
Un buen manejo podrá minimizar los riesgos de transmisión, pero para conseguir un control total de la enfermedad también son necesarias medidas adicionales. En producción avícola se utilizan dos tipos de anticoccidiósicos:
Anticoccídicos químicos
Vacunas
Otra opción para el control de la coccidiosis son las vacunas, que pueden ser vacunas vivas no atenuadas (no disponibles en la UE) y las vacunas vivas atenuadas.
La necesidad por buscar soluciones alternativas para el control de la coccidiosis ha ido en aumento, en parte por el fracaso de los tratamientos farmacológicos y la aparición creciente de resistencias, y por otro lado por la creciente demanda social de la disminución del uso de antibióticos en ganadería por las posibles resistencias cruzadas que pudieran aparecer en medicina humana.
Ciclo de vida de Eimeria spp.
Alternativas naturales para el control de coccidiosis
Dentro de las alternativas estudiadas encontramos las grasas, los antioxidantes, los aceites esenciales y los extractos de plantas o plantas medicinales, siendo la alternativa que presenta resultados más prometedores.
Se encontró una reducción de la severidad de los síntomas en infecciones con E. tenella en dietas suplementadas con ácidos grasos n3 pero no en E. maxima, posiblemente porque dichas dietas inducen estrés oxidativo impidiendo el desarrollo de la E. tenella. En cambio, se han reportado resultados positivos en la modulación del estrés oxidativo usando Tulbaghia violácea, Vitis vinífera o Artemisa afra.
La alternativa que ha ofrecido mejores resultados es el uso de extractos de plantas, pese a que de las más de 300.000 plantas solo se ha estudiado en el 1% el potencial contra enfermedades protozoarias.
El control de la coccidiosis por los extractos de plantas parece deberse a un proceso particular en cada caso: algunos rompen el ciclo de vida de la Eimeria en etapas como la esporulación, inhibida por extractos de Artemisia annua, de Allium sativum y de Camellia sinensis. Otros compuestos de plantas controlan la coccidiosis gracias a que modulan la inmunidad contra Eimeria del huésped, como los extractos de Aloe vera o de los polisacáridos presentes en Astragalus membranaceus Radix, Lentinus edodes y Tremella fuciformis.
Dietas suplementadas con pre & probióticos
Cada vez es más frecuente el uso de dietas suplementadas con pre y probióticos contra coccidiosis. Oligosacáridos tales como arabinoxylo oligosacáridos, fructo oligosacaridos o manano oligosacáridos provienen de derivados de plantas como la cebolla, la alcachofa o el trigo. Disminuyen la presión de infección por coccidios y mitigan los efectos adversos de dicha infección.
Su funcionamiento puede deberse al mantenimiento de un balance óptimo de bacterias que permiten una buena salud intestinal y previenen la inflamación, a la alteración del metabolismo, incrementando la actividad enzimática y ayudando a la digestibilidad o a la estimulación del sistema inmune.
Tabla 1. Eficacia de extractos de plantas contra Eimeria en aves
GP: ganancia de peso; RO: recuento ooquistes; DS: diarrea sanguinolenta;
IL: índice de lesiones; M: mortalidad; C: consumo de pienso
Si hablamos de extractos de plantas con propiedades contra coccidiosis podemos encontrar varios estudios en la bibliografía. La Tabla 1 recoge la eficacia contra coccidiosis de algunas plantas que han sido estudiadas en los últimos años.
Modo de acción de los fitoquímicos
El modo de acción de los fitoquímicos varía dependiendo del fitoquímico y del patógeno en cuestión y en muchas ocasiones un mismo fitoquímico desencadena diferentes modos de acción, la Curcuma longa ha mostrado que es capaz de destruir ooquistes de E. tenella y de regular la actividad humoral del hospedador frente a dicho patógeno. En producción animal es muy difícil determinar la eficacia de un fitoquímico evaluándolo solo en condiciones ex vivo y se hace imprescindible la realización de pruebas in vivo.
Desde el grupo de PH Albio hemos desarrollado Eimex, un producto alternativo en forma de fitoquímico que es una herramienta muy eficaz para el control de coccidiosis en avicultura, disminuyendo el uso de antibióticos y la eliminación del problema de contaminaciones cruzadas sin disminuir la capacidad productiva de la explotación. El efecto positivo de Eimex es consecuencia de su efectividad para interrumpir el ciclo de Eimeria spp. impidiendo la multiplicación asexual dentro del mismo.
Para comprobar la eficacia de Eimex, se desarrolló un estudio en las instalaciones del CESAC. El objetivo de la prueba fue demostrar la eficacia de Eimex frente a cepas de campo de Eimeria spp. Para ello, se utilizaron 120 pollitos de 1 día de vida vacunados frente a Bronquitis infecciosa y enfermedad de Marek que se dividieron en 4 grupos a razón de 15 pollitos por grupo y una réplica por grupo.
El desafío provocado por el inóculo de E. tenella fue eficaz ya que el grupo T4 (animales infectados y no tratados) mostró un aumento significativo tanto en las lesiones intestinales como en la secreción de ooquistes así como unos índices productivos peores. En ninguno de los tratamientos hubo mortalidad debida a la infección.
Gráfico 1. Índice de lesiones intestinales en el día 6 post infección de los pollos inoculados con E. tenella y suplementados con Eimex (T1), de los pollos inoculados con E. tenella y suplementados con un coccidiostato convencional (T2), de los pollos control negativo (T3) y de los pollos control positivo (T4).
No se observaron lesiones intestinales en el caso del control negativo (T3) y el mayor grupo de lesiones fue obtenido en el grupo T4. El grupo tratado con el coccidiostato convencional (T2) fue el que menor índice de lesiones tuvo. El grupo infectado y tratado con Eimex obtuvo un índice de lesiones superiores a las del grupo T3 pero no llegaron a 1,3, nivel por encima del cuál las lesiones pueden traducirse en pérdidas económicas para el avicultor. Eimex fue capaz de controlar la mortalidad frente a un desafío de E. tenella, obteniendo unos índices de lesiones intestinales muy por debajo a los considerados productivamente perceptibles.
Gráfico 2. Recuento de ooquistes en heces a los 6, 7, 8 y 9 día después de la infección (d.p.i) de pollos inoculados con E. tenella y suplementados con Eimex (T1), de los pollos inoculados con E. tenella y suplementados con un coccidiostato convencional (T2), de los pollos control negativo (T3) y de los pollos control positivo (T4).
En el recuento de ooquistes no hubo diferencias estadísticamente significativas en ninguno de los días entre los grupos T1, T2 y T3 aunque, como era de esperar, sí que las hubo entre los 3 grupos ya mencionados y el grupo control positivo (T4). Después de un desafío con inóculo de E. tenella, Eimex fue capaz de controlar la secreción de ooquistes del mismo modo que un coccidiostato convencional.
Gráfico 3. Índice de conversión de pollos inoculados con E. tenella y suplementados con Eimex (T1), de los pollos inoculados con E. tenella y suplementados con un coccidiostato convencional (T2), de los pollos control negativo (T3) y de los pollos control positivo (T4).
En cuanto al índice de conversión (IC), se observó que el grupo tratado con Eimex (T1) fue el que presentó un IC más bajo pese a que no hubo diferencias significativas con el grupo suplementado con el coccidiostato (T2). Los grupos T1 y T2 presentaron unos IC estadísticamente más bajos que los grupos T3 y T4. Podemos decir que Eimex no solo es capaz de controlar una infección por coccidiosis manteniendo los resultados productivos óptimos, sino que el IC mejora si comparamos el del grupo tratado con Eimex con el grupo no infectado (T3). Además del control de coccidiosis tanto Eimex como el coccidiostato convencional provocan un efecto beneficioso a nivel intestinal que permite mejorar los IC de los animales.
En avicultura ser capaces de controlar la coccidiosis de manera eficaz es una necesidad innegable. A día de hoy nos enfrentamos a un nuevo escenario donde además hay que hacer frente a la aparición de resistencias y a la demanda social de encontrar alternativas al uso de antibióticos
El estudio de nuevos fitoquímicos como Eimex, una herramienta eficaz para conseguir una reducción del uso de antibióticos manteniendo unos niveles productivos óptimos, se hace imprescindible.
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