La calidad de los huevos comerciales es un factor clave tanto para la industria avícola como para el consumidor final, ya que influye directamente en la seguridad alimentaria, la vida útil del producto y su valor en el mercado. Diversas variables, como las condiciones de almacenamiento, la higiene de la cáscara y el manejo postpuesta, afectan significativamente su conservación.
En este contexto, la investigación científica ha explorado distintas metodologías para mejorar la calidad física y microbiológica del huevo, evaluando alternativas de limpieza y sellado que contribuyan a prolongar su frescura y reducir riesgos sanitarios.
Este documento presenta un resumen del artículo titulado “Diferentes metodologías de tratamiento de la cáscara de huevo: Impactos sobre la calidad física y microbiológica de huevos comerciales”, el cual analiza y compara la efectividad de distintos protocolos de tratamiento aplicados a huevos frescos. A través de un enfoque experimental, el estudio evalúa cómo cada método influye en parámetros clave de calidad durante un período de almacenamiento, ofreciendo una visión útil para productores, distribuidores y profesionales del sector alimentario interesados en optimizar la conservación del huevo sin comprometer su integridad ni seguridad.
CONTEXTO Y JUSTIFICACIÓN
Los huevos, al ser productos de origen animal, son altamente perecederos. Su calidad se deteriora rápidamente tras la oviposición debido a factores como la edad y genética de la gallina, la temperatura, la humedad, la dieta y la contaminación. Actualmente, la vida útil oficial es de 30 días, lo que resulta limitado frente a otros productos animales.
Ante esto, la industria avícola busca tecnologías que extiendan la vida útil del huevo, principalmente mediante la reducción del biofilm y la carga microbiana en la cáscara, además del sellado de poros para evitar el intercambio de gases y la pérdida de humedad.
TECNOLOGÍAS EVALUADAS
Entre las alternativas destacadas se encuentran:
Cloro: efectivo contra microorganismos, no tóxico en concentraciones recomendadas, actúa formando ácido hipocloroso (HOCl), el cual oxida componentes esenciales de las bacterias, causando su muerte.
Enzimas: digieren residuos orgánicos de la cáscara, facilitando la limpieza.
Aceites esenciales: con propiedades antimicrobianas, cada vez más utilizados en la producción animal.
Selladores como la goma laca: crean una barrera protectora que evita la entrada de contaminantes y la pérdida de humedad....