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Este artículo tiene por objetivo contribuir a una mejor comprensión, alertando cuando sea el caso, en cuanto a los riesgos efectivos de salud pública a causa de ciertos materiales con los que se construyen los dedos de goma desplumadores y, por lo tanto, responsables por contaminación cruzada con origen en túneles de desplumado.
La Salmonella ha sido combatida con éxito, pero cuando llega al área de desplumado todo se complica por culpa de dedos construidos de forma dudosa y sobre los cuales los usuarios no tienen ningún control.
Los dedos desplumadores pueden proteger hasta 99,99% contra bacterias, o ayudar a su diseminación, según estudios científicos, razón por la que son elementos críticos
CASO 1 SEGURIDAD
En el caso N°1 –donde hay seguridad– están los dedos producidos con: Protección bactericida Canales protegidas Libres de la contaminación cruzada Siempre son obligatoriamente construidos con material noble y virgen y protección antimicrobiana incluso en sus partes más internas, por lo que tienen inmunidad a lo largo de toda la vida útil. Se hacen acompañar siempre de laudos oficiales emitidos por entidades reconocidas.
CASO 2 EN RIESGO
En el caso N°2 se encuentran los dedos hechos entre cuyas características se encuentran: Materia prima de fabricación de origen dudoso Sin comprobación de procedencia rastreable Materiales reciclados o regenerados Se ofrecen sin ninguna garantía real, con el agravante que no poseen ninguna protección bactericida. Es natural que potencien la infección de las canales. Para confundir a los usuarios, tales piezas hasta se hacen a veces acompañar de “laudos” no reconocidos por órganos oficiales, antiguos o que versan sobre resultados diferentes del fin propuesto
Con poco tiempo de uso, los dedos de calidad dudosa se presentan desgastados, acentuando la fijación de bacterias en toda su superficie, especialmente en la región que tiene contacto directo con las plumas –Figura 2–.
La diferencia entre dedos de material noble y aquellos de material dudoso ya es visible antes de ser puestos en operación. Recuerden observar el color, olor y visualizar el neumático –Figura 3–. Los dedos fabricados con materiales dudosos se hacen buscando abaratar costos y así competir entre fabricantes preocupados en ganar mercado y no con excelencia. Es natural que sean potencialmente peligrosos, abriendo un flanco para que las bacterias se alojen fuertemente en sus partes corroídas, donde existan desgastes, saltos, fisuras, ranuras, grietas, reentradas, hasta en lugares imperceptibles a simple vista.
Las consecuencias resultan pésimas debido a que no existen protocolos de higienización y desinfección bastante rigurosos que consigan éxito en estos casos. Dependiendo del estado del dedo, y a pesar de los esfuerzos de sanitización realizados en los túneles, todo el trabajo acaba no valiendo de nada y el próximo desplumado puede estar previamente destinado a la contaminación.
Los dedos sufren desgastes y se rompen fácilmente porque a lo largo de su funcionamiento sufren una fricción impresionante. Las piezas mal construidas se corroen con la fatiga, incluso los “dedos de silicona” o “poliuretano termoplástico” –Figura 4–, todos nichos ideales para la proliferación logarítmica de bacterias.
Según las investigaciones realizadas en Estados Unidos, el impacto sufrido por la canal en el acto del desplume, guardadas las proporciones, sería similar al del neumático de un avión al aterrizar –Figura5–. Asimismo, todo cuidado con los dedos es poco, ya que sus partículas se alojarán en la piel e incluso en partes de la carne.
Antes los neumáticos viejos y los residuos de los desechos de los elastómeros eran basura tóxica muy molesta para toda sociedad, de difícil degradación. Por suerte para el medio ambiente vinieron las industrias de reciclaje, donde los desechos inutilizables de las industrias del caucho son reducidos a un polvo negro, cáustico, fértil, de baja calidad y barato, reutilizados en la producción de nuevos artefactos de caucho de uso no humano, como en las rampas de la Basílica de Aparecida –Figura 8–, Industrias de recauchutado, carreteras, etc.
El material regenerado obtenido a partir del reciclaje no debería nunca ser reutilizado en piezas que puedan tener contacto con alimentos
Dedos de silicona o “de poliuretano termoplástico”
La silicona es un tipo de goma “atóxica”, siendo ésta su única ventaja. Como oposición a su uso, hay cuatro puntos negativos:
- Falta de resistencia a la abrasión
- Propensión a romperse
- Apta a la deformación
- Alto costo
La aplicación de la silicona solo es adecuada en productos que tengan contacto directo con humanos (preservativos, chupetes, etc.), pero no para la fabricación de piezas que exijan esfuerzos continuos, desgastes y resistencia, por lo que no hay “dedos de silicona”.
Existen piezas de material “poliuretano termoplástico”, apodados “dedos de silicona”, que no son más que un tipo común de plástico que, a una determinada temperatura, presenta alta viscosidad, pudiendo entonces ser conformado y moldeado en el formato de cualquier cosa, como, por ejemplo, dedo desplumador
Algo que llama sorprendentemente la atención es que, con el uso, sufren una serie de cambios apreciables a simple vista: Cambian peligrosamente del color claro al amarillo Se deforman Sueltan pelusas que pueden penetrar en las canales –Figura 9–
Hasta hoy no se sabe si el material empleado para su fabricación forma parte de la lista positiva de la ANVISA y del propio FDA, o si poseen también grado alimenticio. Se desconoce además, si el cambio de color podría estar trayendo riesgos a la salud humana y hasta qué punto contribuiría a la incidencia de contaminación cruzada en el momento del desplume.
A tener en cuenta…
Todos los dedos absorben humedad ambiente. Dependiendo de la calidad y la forma como son producidos, esto puede contribuir fuertemente a la creación de nichos favorables a la fijación bacteriana y al desarrollo de biofilm.
Terminado el sacrificio entran en operación los equipos de limpieza, higienización y desinfección, que será inservible dependiendo del estado de los dedos. A pesar que el desplumado es rápido, si los dedos son de calidad dudosa bastan sólo unas pocas canales con Salmonella en el túnel para que la línea entera se contamine. El desastre es casi seguro, pues el territorio es altamente propicio a riesgos.
Plantas de sacrificio
Las plantas de sacrificios, deberían exigir a las autoridades rigurosas fiscalizaciones en las fábricas de dedos. Sería una mejora para todos incentivar la transparencia del sector de las plantas de sacrificio, que es donde al final reside el origen de muchos de los problemas vividos hoy.
Los dedos son considerados como críticos al ser un elemento fundamental en el desplume
Recientemente se logró desarrollar la Formulación Antibacteriana que llega a ser eficaz hasta 99,99% contra Salmonella, inclusive con el beneficio de que las piezas siguen operando contra las bacterias, aun cuando los dedos sufran desgastes. En lo que depende de esta avanzada tecnología, las bacterias tienen sus días contados y la contaminación cruzada en el tamizaje también. Para los consumidores de carne de aves es positivo.
Beneficios de los dedos construidos con materiales nobles & protección bactericida
- Presentan una durabilidad por sobre de la media, pues no sufren descomposición en su contenido o eficacia, aunque sea en altas temperaturas y tampoco son lixiviados para el medio ambiente
- Protegen las canales durante todo el tiempo mientras estén en operación, sin importar a qué punto sufren desgastes.
- Por el hecho de que la protección está en toda la pieza, incluyendo su interior, la eficacia contra la Salmonella perdurará mientras esté en operación.
- El efecto técnico es la obtención de un material claramente resistente a la proliferación de bacterias, aumentando significativamente la seguridad alimentaria de los productos originados en las plantas de sacrificios usuarias.
- Dedos construidos con esta formulación ayudan a controlar un nivel de hasta 99,99% la contaminación cruzada en los túneles de desplume
- Por consiguiente, ayudan a prevenir la proliferación de bacterias en el ambiente fabril, especialmente si es aliado en su construcción a materiales nobles
- Contribuye a reducir el uso de productos químicos en el saneamiento de plantas alimentarias, en especial en túneles de desplumado.
- La Protección Bactericida permanece intacta durante el moldeo de los dedos por inyección, compresión o transferencia.
- Esto significa seguridad de obtener piezas siempre perfectas en cualquier circunstancia.
- Dedos construidos con material noble y aún con protección bactericida elevan sustancialmente el grado de seguridad de los productos cárnicos.
- Esto significa una reducción de los costos de producción con la maximización de los resultados.
- Esta protección se puede aplicar también en el sacrificio de porcinos, máquinas cosechadoras de alimentos, ordeñadoras de vacas, etc.