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Enfermedades avícolas frecuentes en reproductoras pesadas alrededor del mundo. Parte 1

Escrito por: Nick Dorko - Chefe Global de Serviços Técnicos Veterinários Aviagen Incorporated - Huntsville, Alabama
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patología reproducción avícola

Las enfermedades avícolas observadas alrededor del mundo cambian constantemente en los distintos continentes, países y regiones. Muchas de estas dependen de las condiciones de bioseguridad, los programas de vacunación, la presencia de aves migratorias y movimientos globales de personas, entre otros numerosos factores.

Esta es la primera parte de una serie de dos artículos donde se hará un breve resumen de las enfermedades encontradas con mayor frecuencia por veterinarios, productores y el propio autor en las reproductoras pesadas en parvadas de reproductoras en varias zonas productoras de pollo de engorda del mundo.

Mycoplasma synoviae (MS)

Esta enfermedad ha estado presente de forma persistente, pero en los últimos 5 años parece haberse convertido en un problema de mayor envergadura. A menudo se presenta como una infección silenciosa en la que los lotes de reproductoras pueden seroconvertir (aparecer positivas en pruebas serológicas) a MS sin mostrar signos de la enfermedad ni observarse un impacto negativo sobre su rendimiento (que suele ser algo difícil de medir).

Hay algunas razones posibles que pudieran explicar la reemergencia de MS:

Figura 1. Un ejemplo de anomalías del vértice del huevo (Eggshell Apex Abnormalities – EAA) o la conicidad del vértice (Top Coning) asociadas a MS.

 

Coccidiosis

Esta enfermedad se observa con mayor frecuencia debido a malas prácticas de manejo siguiendo el uso de vacunas vivas de coccidiosis. Todo comienza con una vacunación adecuada en la planta de incubación (más común) o en el campo. La vacuna debe ser manejada correctamente (por ejemplo, la vacuna no debe congelarse) y administrada adecuadamente. Recordemos que durante la preparación de la vacuna los ooquistes pueden precipitarse en la solución rápidamente si no hay una agitación suave y continua.

Una vez que la vacunas son aplicadas correctamente, se deben tener condiciones adecuadas en la granja para permitir la esporulación de los ooquistes, promover su reciclaje entre las aves y su distribución a lo largo del galpón. Este proceso puede no ocurrir por numerosas razones tales como cama demasiado seca o húmeda, densidad de animales demasiado alta o baja, la administración de de productos anticoccidiósicos, etc.). Si alguno de estos eventos ocurre, las aves tendrán una reacción severa, provocando problemas de coccidiosis en poco tiempo (normalmente a los 14-30 días de vida) o, si no son expuestas a suficientes ooquistes vacunales y/o su reciclaje en la cama, el resultado suele ser un brote de coccidiosis semanas más tarde (6-20 semanas de vida).

La inmunosupresión severa, por ejemplo, si las aves han padecido la Enfermedad de Marek o la Anemia Infecciosa Aviar, es otra causa común que puede desencadenar brotes de coccidiosis incluso en aves vacunadas.

Virus de la Enfermedad de Newcastle Velogénica & Viscerotrópica (VVND)

Esta forma exótica del virus de la Enfermedad de Newcastle se ha detectado en muchas regiones del mundo. En áreas donde el virus es endémico, las aves deben vacunarse para protegerse frente a la morbilidad, la mortalidad y caída de la postura asociadas a la enfermedad.

En aves no vacunadas y expuestas a estos virus, la morbilidad y mortalidad puede llegar al 90-100%, similar a brotes con la influenza aviar altamente patógena (del inglés, highly pathogenic avian influenza o HPAI).

Comúnmente los programas de vacunación incluyen combinaciones de vacunas vivas e inactivadas para lograr altos títulos de protección. Vacunas de baja calidad, prácticas de vacunación deficientes y/o la administración de una cantidad insuficiente de vacuna puede resultar en niveles de anticuerpos incapaces de proteger a las aves contra la morbilidad, mortalidad y caída de la postura.

Si las aves no están suficientemente protegidas, es común ver una ligera caída de la postura (5-15%) y un ligero incremento de la mortalidad (0,5-1,0%). Entre los signos típicos de la enfermedad se observa:

Histomoniasis (Enfermedad de la cabeza negra)

Esta enfermedad se presentaba solamente en los Estados Unidos, pero recientemente ha estado causando problemas en varios países de la Unión Europea y en algunas partes de Asia y América Latina. La razón por la que esta enfermedad se ha convertido en un problema es que, en la mayoría de los sitios, todos los productos terapéuticos o preventivos han sido retirados oficialmente del mercado.

En los Estados Unidos, la mayoría de los galpones tienen piso de tierra y a menudo reutilizan la cama, lo que hace difícil lograr una completa limpieza y desinfección para controlar a los portadores del protozoario Histomonas meleagridis que es el causante de la enfermedad (Figura 3)

Los principales portadores de las histomonas son los nematodos cecales (Heterakis gallinarum) y algunas lombrices de tierra. Existen evidencias que los escarabajos de la cama también son portadores de este patógeno. También hay la creencia que incluso podría existir una transmisión directa entre las aves. La mejor forma de prevenir o controlar la enfermedad de la cabeza negra es a través de una completa y eficaz limpieza y desinfección de los galpones. En algunos casos se recomienda aplicar sal al piso o tratamientos químicos como el hipoclorito de sodio.

Es importante también limpiar las cajas y jaulas de transporte de pollitas, ya que estas pueden contaminarse y ayudar a la transmisión de las histomonas durante el proceso.

La enfermedad de la cabeza negra se ha visto en algunos galpones a partir de los 13 días. De tal manera los tratamientos tempranos y frecuentes contra parásitos internos (nematodos) es una forma muy eficaz para controlar la enfermedad. Esto implica administrar tratamientos hasta 4-5 veces antes del inicio de la postura y el uso de más de un producto antiparasitario. La administración de tratamientos durante más de un día también parece ayudar a que todas las aves reciban la dosis efectiva del producto desparasitador.

 

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