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El aparato reproductivo de la gallina es un sistema con cuatro componentes:
Encargado de dirigir las operaciones hormonales, tiene como ayudante a la adenohipófisis
Motor inicial de la formación del huevo -ya que allí se desarrollan los folículos que serán las yemas- requiere del suministro constante de ácidos grasos desde el hígado
Se forma la cáscara y, por lo tanto, requiere de un gran colaborador: el hueso medular. Y es así de específico porque, si a las células del útero encargadas de mineralizar la cáscara llegan minerales del hueso cortical, el ave está perdiendo la lucha en el juego de la remodelación ósea: osteoblastos frente a osteoclastos.
Es importante planear juiciosamente:
Van Sickle, hace más de 30 años, describió los aspectos importantes a tener en cuenta desde el primer día de edad hasta que se retire la gallina adulta:
Sin embargo, lo que se puede hacer es construir una curva estándar de crecimiento y desarrollo del hueso para evaluar el comportamiento óseo de las aves. Esta es una variable adicional a las que se utilizan normalmente como peso corporal, consumo, etc.
Importancia de la medición del hueso
La importancia de la medición del hueso es que nos indica:
En la Tabla 1 se detalla el efecto de tres mediciones en fémur y su correlación con dos variables en huevo, la producción y el peso corporal.
El área cortical tiene efecto significativo e inverso sobre:
El área medular presenta relación directa y altamente significativa sobre la gravedad específica y el peso del huevo.
Más área significa más espacio para la fijación de calcio en el hueso medular, y desde allí el ave lo movilizará para mineralizar la cáscara.
Para lograr un efecto positivo sobre las variables del huevo, el trabajo se realiza en la tercera onda de crecimiento y desarrollo del ave: semanas 14 a 24.
Más área significa afectación negativa de esas tres variables
Se tiene actividad importante a implementar durante las 13 primeras semanas de vida en donde se desarrolla el hueso cortical. Como es de esperar, favorece directamente –pero no significativo- al peso corporal; concepto fundamental para la etapa de levante, ya que habla de la relación entre el desarrollo esquelético y la ganancia de peso corporal.
La Tabla 2 enumera diferentes conceptos sobre las tres etapas de desarrollo del hueso; lo que conlleva a objetivos durante cada una de ellas relacionadas con el crecimiento y desarrollo óseo.
Etapa 1: Desarrollo cortical
Para el hueso cortical y la estructura de soporte del ave
Etapa 2: Desarrollo medular
Para el hueso medular y la construcción de la reserva de nutrientes –especialmente calcio– para mineralización de la cáscara
Etapa 3: Mantenimiento del hueso
Se busca retrasar la aparición de los síntomas de deterioro óseo como debilidad y rotura de cáscara, prolapsos y fatiga de jaula.
Whitehead reportó que el hueso de la gallina comienza a debilitarse a partir del momento en que se producen 200 huevos, lo que corresponde a 50-52 semanas de vida.
Con objetivos claros en cada una de estas etapas, se debe diseñar un plan de trabajo para lograr que el hueso de las aves de una granja comercial soporte la formación de las cáscaras
Lograr que el hueso de las aves de una granja comercial soporte la formación de las cáscaras es un reto fuerte, porque el esqueleto de la gallina actual es más pequeño que la que estaba en galpones cuando Van Sickle propuso los 3 aspectos a tener en cuenta en el desarrollo óseo. Una propuesta inicial es volver a mediciones de longitud de hueso y la construcción de la curva estándar en cada granja. El plan de trabajo presenta muchas variaciones debido a las diferentes formas de producir huevos:
Levante oscurecido
Un ejemplo para resaltar la importancia de cada una las variaciones planteadas está en el levante oscurecido. Es probable que los problemas óseos comenzaran cuando se emuló esa técnica de manejo desde las reproductoras pesadas hasta las ponedoras comerciales Brown. Nada es unifactorial o univariable. Aparecieron situaciones como:
Ninguna de las tres etapas de desarrollo del hueso es más importante que otra; sí en una de ellas se falla, tendremos más trabajo técnico durante las otras dos
En caso de no alcanzar el desarrollo del hueso cortical se puede observar en las casetas síntomas como:
No lograr objetivos en la etapa 2 conlleva a retraso en inicio de producción, prolapsos y fatigas de jaula a partir de la semana 25 –especialmente aves de bajo peso– y aparición de cáscaras débiles antes de la semana 50 de edad. La característica de las actividades realizadas durante etapas 1 y 2, es que son preventivas; y todo lo que realicemos en la etapa 3 se hace con el ave produciendo huevos y la exigencia dependerá de lo preventivo realizado y el nivel productivo del lote de aves.
Aspectos a tener en cuenta durante el crecimiento, desarrollo y mantenimiento del hueso
La diferencia entre los puntos 2 y 7 se relaciona con el efecto del carbonato de calcio grueso en el ave; en las pollas se busca estimular el crecimiento y desarrollo del tracto gastrointestinal (no es función nutricional directa). En las gallinas es fuente de calcio con absorción nocturna para fabricación de la cáscara