COMPONENTES DE LA SALUD INTESTINAL
El intestino de las aves es el órgano con mayor superficie que interactúa con el medio, por lo que el intestino debe ser una barrera eficaz:
Contiene una gran cantidad de neuronas, hormonas intestinales y mensajeros secundarios, por lo que se considera el órgano neuroendocrino más grande del cuerpo y, por lo tanto, regula una multitud de funciones fisiológicas del huésped. (Neuman et al., 2015)
Morfológicamente, el tracto gastrointestinal es un tubo hueco que va desde el pico y termina en la cloaca, siendo la función principal la conversión de los alimentos en sus componentes para su absorción y uso por parte del ave. |
Como se ve en la figura 1, el intestino se divide en :
Cada región tiene un papel específico en el proceso de digestión y absorción de nutrientes.
La mucosa intestinal presenta proyecciones microscópicas, que se denominan vellosidades, constituidas por tres tipos de células:
Los nutrientes absorbidos por los enterocitos son transportados por los vasos sanguíneos presentes en las vilosidasas.
Las células enteroendocrinas funcionan para activar el páncreas exocrino cuando los alimentos ingresan al intestino delgado.
Las células caliciformes, por otro lado, son importantes para la producción de moco, en el que protegen mecánicamente la mucosa contra la entrada de patógenos, evitando que se adhieran a la pared del órgano e inicien un proceso infeccioso (Guerra, 2018).
DESARROLLO DEL TRACTO GASTROINTESTINAL
En el momento de la eclosión, el tracto gastrointestinal de las aves está anatómicamente completo, pero funcionalmente inmaduro (Maiorka, 2004).
El rápido desarrollo del tracto gastrointestinal está relacionado con el consumo de alimentos y cuando la alimentación se retrasa, las aves muestran un menor desarrollo intestinal con un rendimiento reducido (Maiorka et al., 2003).
Durante este período, el ave debe pasar de usar energía en forma de lípidos, de la yema, a una dieta rica en carbohidratos (Noy y Sklan, 1999). Por lo tanto, el ave debe tener un acceso rápido a la alimentación, para evitar dañar la función intestinal.
Para el desarrollo intestinal, el momento y la forma de los nutrientes disponibles después de la eclosión es fundamental, por lo que el acceso temprano a los alimentos fomenta el crecimiento y el desarrollo intestinal (Potturi et al., 2005). |
Para el desarrollo y mantenimiento de la mucosa intestinal deben ocurrir dos eventos citológicos asociados:
a) renovación celular, que es el proceso de proliferación y diferenciación celular;
b) pérdida de células, que es el proceso de extrusión (Maiorka et al., 2003).
Es necesario que haya un equilibrio entre estos eventos para garantizar el mantenimiento del número de células y la capacidad funcional del epitelio (Oliveira et al., 2012).
Existen factores endógenos y exógenos que pueden modificar la microbiota, tales como:
ADITIVOS PARA LA SALUD INTESTINAL
Algunos aditivos alimentarios y minerales pueden influir positivamente en el desarrollo del músculo intestinal, ayudando a mantener la salud intestinal, mejorando así la digestión y la absorción de nutrientes.
Entre estos aditivos tenemos: probióticos, prebióticos, enzimas, ácidos orgánicos, aceites esenciales, aminoácidos como la glutamina y algunos minerales como el cromo.
CONSIDERACIONES FINALES
El tracto gastrointestinal es clave para el éxito del proceso de producción, ya que se encarga de digerir y absorber los nutrientes, transformando los granos / cereales en proteína animal. Por tanto, la salud intestinal tiene un efecto directo sobre la productividad, el bienestar animal, la seguridad alimentaria y el impacto medioambiental.
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