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Puntos clave de manejo de las reproductoras en las distintas fases de la recría

Escrito por: Sara Llorens Cardona
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Fases de la recría, ¿cómo podemos llegar a nuestro objetivo?

OBJETIVO Y FASES DE LA RECRÍA

Cuando recibimos un lote de reproductores, empieza desde ese momento una nueva etapa en la que se deben de tener claras las fases que hay durante la recría para poder proporcionar un manejo óptimo a los animales y poder lograr el objetivo de obtener el mejor desarrollo, preparando a los animales para la madurez sexual, juntamente con una buena condición corporal y uniformidad del lote.

¿En cuántas fases se puede dividir la recría y qué es lo que sucede en cada una?

1ª FASE: 0 – 4 SEMANAS

¿Qué sucede en esta fase?

Es esencial proporcionar un buen arranque a los pollitos reproductores cuando llegan a la granja para su salud y bienestar, uniformidad, rendimiento y desarrollo del lote.

¿Qué se debe de tener en cuenta en esta etapa?

Las aves deben de arrancar en las mejores condiciones posibles y llegar al peso estándar a las 4 semanas trabajándolo desde la primera semana de vida.

Va en contra de la uniformidad llegar a las 4 semanas con un peso muy superior al estándar, ya que muchas veces como respuesta a eso se tiende a restringir el alimento para reducir el crecimiento, por lo que no se está administrando los consumos necesarios para cumplir las necesidades de las aves, el aporte de aminoácidos, vitaminas, energía, proteína… será menor y como consecuencia también será menor su desarrollo general.

2ª FASE: 4 – 10 SEMANAS

¿Qué sucede en esta fase?

En esta fase debemos de aprovechar que el esqueleto aún no está formado completamente para recuperar las aves con un peso inferior a la media, siendo una fase de control de pesos.

¿Qué se debe de tener en cuenta en esta etapa?

Cuando tengamos aves con peso inferior o superior al objetivo, la meta es ajustar el perfil de crecimiento de manera que las aves alcancen el objetivo gradualmente hacia las 9 semanas de edad (63 días).

Las raciones de alimento nunca se deben reducir, pero si es necesario, se puede retrasar el siguiente incremento de la ración con el fin de lograr un nuevo perfil.

3ª FASE: 10 A 15 SEMANAS

¿Qué sucede en esta fase?

En esta fase ya tenemos el esqueleto formado al 100% y el objetivo es evitar que las gallinas se engrasen y engorden en exceso, es una fase de mantenimiento.

¿Qué se debe de tener en cuenta en esta etapa?

Debemos de reevaluar el peso de la población en relación al objetivo, como en la anterior fase.

Si tenemos aves que continúan con pesos inferiores o superiores al objetivo a las 9 semanas de vida, se deberá de trazar un nuevo perfil de crecimiento de manera que las aves alcancen el objetivo gradualmente hacia las 15 semanas de vida (105 días).

Para lograr esto, se debe aumentar la ración o adelantar el próximo incremento en aves con pesos inferiores.

En aves con pesos superiores si es necesario se puede retrasar el siguiente incremento de la ración con el fin de lograr un nuevo perfil, pero nunca reducir la ración.

4ª FASE: 15 – 20 SEMANAS

¿Qué sucede en esta fase?

En esta fase se desarrolla todo el aparato reproductivo, la deposición grasa (%) y el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios, es una de las fases más importantes a tener en cuenta.

¿Qué se debe de tener en cuenta en esta etapa?

El objetivo en esta fase es mantener una correcta uniformidad del lote y preparar a los animales para la transición a la granja de producción y el inicio de producción de huevos, de esta manera aseguraremos un buen rendimiento del lote.

Es importante llegar a esta fase con una buena condición corporal y con pesos similares al objetivo para poder realizar incrementos de pienso más intensos que serán de ayuda para preparar a los animales de cara a la producción y a los futuros estímulos que van a recibir.

Si se llega a esta fase con pesos muy superiores al objetivo no se podrán realizar estos incrementos de pienso, solamente se podrá realizar si el estado corporal de los animales nos lo permite y los piensos utilizados siguen las recomendaciones estrictamente marcadas por la casa de genética.

En esta fase debemos de reevaluar el peso de la población en relación al objetivo como en la anterior fase, la supervisión frecuente y el registro del peso corporal y la uniformidad son herramientas vitales de manejo.

Las aves no pueden llevarse al peso objetivo estándar si tienen sobrepeso en esta etapa, esto daría como resultado una pérdida en la condición física afectando negativamente a la producción.

El desarrollo de características sexuales secundarias, tales como la separación de los huesos pélvicos en las hembras y aumento de la intensidad del color facial en ambos sexos son buenos indicadores del progreso de la madurez sexual del lote.

Para conseguir aves preparadas y con una variación mínima en el inicio de la madurez sexual se tiene que realizar un buen manejo enfocado a cada fase de la recría.

A medida que las aves van creciendo el coeficiente de variación irá en aumento a causa de las diferentes respuestas individuales de las aves y factores tales como cambios ambientales, manejo en la iluminación, vacunaciones, enfermedades, cambios de pienso, etc.

En las siguientes gráficas se observa claramente la evolución de la variación de lotes sin clasificar y lotes con clasificación, observándose a las 15 semanas (105 días) una diferencia clara de desviación.

¿Qué preguntas nos debemos de hacer para entender la importancia de la uniformidad?

¿Por qué es tan importante la uniformidad?

Si se logra tener aves en estado fisiológico similar, éstas responderán de manera similar a los factores de manejo.

¿Qué se obtiene con estas respuestas similares?

El control sobre el éxito productivo y de bienestar de los animales.

¿Cómo se logra?

Seleccionar las aves y dividirlas en subgrupos para así lograr el control sobre los pesos corporales con coeficientes de variación mínimos y crecimientos uniformes acorde con los objetivos de peso marcados.

¿A quién se selecciona?

Se debe de seguir las mismas pautas tanto en machos como en hembras.

¿Cuándo se debe de empezar a seleccionar?

Se debe empezar lo antes posible. Es decir, desde la llegada de los animales a la granja.

Para trabajar la uniformidad estas son las edades en las que se recomienda hacer una selección total de los animales:

Puntos importantes para realizar una buena selección:

CONCLUSIONES

El objetivo es lograr un lote lo más uniforme posible y preparado con una madurez sexual similar, para conseguir un buen rendimiento del lote en producción. Para ello, es necesario dedicarle tiempo y constancia en todas las fases de la recría y empezar desde el primer día de vida de los animales, trabajando la uniformidad y la condición corporal en cada momento.

La uniformidad es la clave para asegurar un buen rendimiento del lote en producción.

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