Manejo & Bienestar
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En esta oportunidad se analizan los puntos más neurálgicos del sector productivo de huevo de Latinoamérica, donde este producto avícola continúa siendo una proteína accesible, económica y versátil.
El mundo está en un contexto delicado donde hay variables para tener en cuenta.
Hoy día la economía y el comercio internacional son manipulados por los 3 gigantes económicos- comerciales como USA- CHINA- Unión Europea.
El huevo sigue siendo una proteína accesible, económica y versátil. Con excepción de Argentina, Brasil y República Dominicana, la mayoría de los países producen huevos para su mercado interno.
Brasil, está comenzando a marcar presencia en el mercado internacional de huevos, lo que antes era solo exportaciones en cáscara ahora también lo son de ovoproductos.
En cambio, Argentina que desde 2003 comenzó a marcar presencia internacional en huevo en cáscara y ovoproductos, actualmente prácticamente no exporta huevo en cáscara y si está muy presente en ovoproductos.
La situación de Argentina donde tenemos maíz y soja en grandes cantidades y que se comercializan con subsidios internos nos debería llevar a producir a precios bajos y competitivos.
El gobierno actual, además de corregir los altos niveles de inflación deberá sincerar el tipo de cambio y bajar impuestos si realmente quiere que la matriz productiva desarrolle todo su potencial productivo.
La influenza Aviar ingresó a Sudamérica, y entendemos que en el contexto actual llegó para quedarse. Los retos son:
Sudamérica es una región donde las aves de traspatio se encuentran muy frecuentes. Con el agregado que muchos Gobiernos fomentan economías familiares de subsistencia con la cría de aves de corral principalmente.
El gran desafío es hacer entender a los países compradores, muchos de ellos con Influenza Aviar en sus territorios, que la única salida hoy día es la vacunación.
Asimismo, si no conseguimos la necesaria inmunidad de rebaño corremos el riesgo que esto se desmadre y generar una situación sanitaria que sea más allá de los animales, que llegue a los humanos.
¿Alguno se hizo la pregunta qué pasa si llega a humanos y provoca una pandemia? ¿El daño que llegaría inmediatamente al sector? ¿El cierre de establecimientos? ¿La desocupación? El daño ambiental por el soterramiento de millones de cadáveres. Con solo pensarlo da escalofríos.
El huevo, más allá de ser un producto accesible, económico y versátil es un producto amigable al medio ambiente.
El huevo es la proteína de origen animal más amigable al medio ambiente, ya que genera la menor huella de agua y la menor huella de carbono.
En un mundo, donde el cuidado del clima debe ser más criterioso y celoso, que demanda que se bajen las emisiones de gases para contribuir al cuidado del medio ambiente la producción de huevos es esencial.
JAULAS SÍ VS JAULAS NO
Este tema, que afortunadamente está menos candente que años pasados, es algo que no debemos dejar de lado. Todos sabemos que hay más intereses económicos que de bienestar animal detrás de esto.
También sabemos que quienes nos quieren obligar a producir de una determinada manera no son nuestros consumidores, sino más bien son grupos de veganos, bajo la fachada de ONG animalistas, quieren obligarnos a que comamos huevos de una determinada producción, y que ellos nunca comerían.
Igualmente, también quiero dejar en claro que 60 años de desarrollo genético donde los animales están diseñados para un determinado entorno, no podemos cambiarle el mismo de la noche a la mañana. Se han hecho muchas correcciones, no obstante, hay otras que debemos hacer.
El huevo en jaula es un huevo amigable al medio ambiente, amigable al productor y al consumidor, tiene ventajas sanitarias, de inocuidad y económicas.
En un mundo donde cada vez hay más necesidad de alimentos, el huevo posee un rol que es fundamental en este contexto mundial.
Que nos dejen producir en todos los sistemas actuales y que sea el consumidor quien determine qué producto quiere consumir.
CONCLUSIÓN
No quiero terminar sin dejar de expresar la preocupación que algunos países han hecho la transición de sistemas productivos tradicionales a jaulas enriquecidas o aviarios, lo que le ha provocado una gran ineficiencia productiva, ineficiencia que quieren trasladar a muchos países.
Es como decir, nos obligan a esto, nosotros no sabemos cómo pararlo y nos sometemos, ahora hagamos que el resto de los productores hagan lo mismo.
Tomaron decisiones que están complicando el negocio y quieren trasladar su complicación al resto del mundo productivo, donde menos del 15% de las aves a nivel mundial producen en jaula y más del 85% en jaulas.
Con lo expuesto considero que he abordado los puntos más neurálgicos del sector productivo de huevos de Latinoamérica.