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Salud Intestinal el mejor promotor del crecimiento

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salud intestinal

Contenido disponible en: Português (Portugués, Brasil)

FRANCISCO PORTELA

Gerente de desarrollo del mercado avícola en Latinoamérica y Canadá para Diamond V Desde Julio del 2014 hasta el presente trabaja en Diamond V, apoyando al desarrollo del Mercado Avícola para las Regiones de España, Portugal, Latinoamérica y Canadá. El Ing. Portela ha publicado varios artículos científicos e industriales en diferentes revistas de la Industria Avícola. Tiene además una dilatada carrera profesional en el sector de la avicultura (Shur-Gain Grain Division of Canadá Packers Inc, Shaver Poultry Breeding, ISA Breeders, Hubbard Breeders y British United Turkeys, Hy-Line International).

PUNTOS A TENER EN CUENTA

Desde el punto de vista nutricional, una adecuada salud intestinal se logra con un pienso bien balanceado y un buen programa alimentario los cuales deben de llenar todos los requerimientos nutricionales para que el ave logre alcanzar su potencial genético con la mejor viabilidad posible. Un ave sana vive mejor y produce mejor.

La salud del ave esta ligada a un sistema inmunológico eficiente y a una buena eficiencia del sistema digestivo.

Estos dos sistemas trabajan conjuntamente para mantener el buen rendimiento productivo de los broilers y se deben de desarrollar los más rápido posible. Cabe mencionar que la mayoría de la respuesta inmune se encuentra en el sistema digestivo dando como conclusión, que es crítico alcanzar una buena salud intestinal y por ende se logren alcanzar los objetivos establecidos por las casas genéticas.

Los problemas intestinales se originan con una mala alimentación y condiciones no higiénicas, especialmente los primeros días de edad

Hoy día, para mantener una operación económicamente competitiva y un desarrollo sostenible de la producción se necesita trabajar y reitero, en mantener una buena integridad intestinal, una nutrición apropiada un medio ambiente limpio y si existe algún tipo de desorden intestinal… ¡arreglarlo!

En las últimas décadas, los productores avícolas han buscado diferentes alternativas al uso de antibióticos para lograr una mejor salud intestinal y así mejorar sus ingresos. Hay varias categorías de “mejoradores” de la salud intestinal y el entenderlos sin confusiones, por uno mismo y sin necesidad de un buen “comunicador comercial”, se vuelve en toda una hazaña La mayoría de los estimuladores o mejoradores de la salud intestinal se pueden agrupar en estas categorías:

Los Pre-bióticos o pueden ser fibras dietéticas que promueven el crecimiento de cierto tipo de bacterias benéficas en el intestino o son ingredientes no digestibles que se añaden al pienso que permiten cambios específicos, tanto en la composición así como en la actividad de la microflora intestinal, la cual tendrá una gran influencia el bienestar y la salud del ave (anfitrión).

Su modo de acción es proveer nutrientes a bacterias benéficas y también engañar a las bacterias patógenas para que se adhieran a su lado oligosacárido y no a la mucosa intestinal, esto logra reducir (pero no eliminar) la carga bacteriana patógena, la cual es excretada con los demás ingredientes no digeribles.

Es muy importante mencionar que son termoestables, importante si se peletiza o se extrude el pienso. Ejemplos de estos prebióticos se encuentran:

Si el número o la carga bacteriana es mayor a la cantidad ingerida de estos pre-bióticos, siempre quedará un carga bacteriana patógena fuerte la cual va a re-infectar al anfitrión y por eso, el uso de antibióticos combinado con un prebiótico ha sido “efectivo” sin embargo, todavía existe casos de infecciones bacterianas en los consumidores y los problemas de la mortalidad elevada de las parvadas no se mejoran.

Los Pro-bióticos por definición son organismos vivos (bacilos, lactobacilos, Bífido-bacterias como ejemplo) que se agregan directamente al pienso y que ejercen efectos benéficos en la salud de las aves.

Estos pro-bióticos están garantizados de que contienen una cantidad determinada de unidades formadoras de colonias (UFC) por gramo (o por kilo) que pueden afectar benéficamente al anfitrión alterando el balance microbial en los intestinos, sembrando bacterias benéficas o saprófitas. Su modo de acción principal es por exclusión competitiva, las bacterias benéficas se adhieren al la mucosa intestinal previniendo a las bacteria patógenas que lo hagan.

Los pro-bióticos NO son termo resistentes y deben estar protegidos contra las jugos gástricos (saliva, acido estomacal, sales biliares). A través de los años se ha determinado que los pro-bióticos deben de darse en grandes cantidades y a veces necesitan de otros ingredientes para ser más efectivos en su modo de acción.

Los Extractos Botánicos y los Fitogénicos como lo dicen sus nombres, son derivados de hierbas, especies y otros productos vegetales. Los Aceites Esenciales, Ácidos orgánicos y Acidificantes son derivados compuestos ya sea de ácidos grasos de cadena corta u otros ácidos grasos volátiles. Estos son insolubles en el agua y contienen compuestos aromáticos también derivados de las plantas.

El modo de acción es limitar el crecimiento de bacterias patógenas a través de una acción anti microbial no especifica o una actividad antioxidante. Generalmente se trata de reducir el pH del intestino por debajo de 6.0 y al mismo tiempo promover la flora intestinal. Por ejemplo el Ácido Butírico, aumenta la proliferación de las células epiteliales intestinales aumentando la capacidad absorbente de nutrientes por parte del intestino. Se han utilizado solos, pero hoy en día, la combinación con otros aditivos es imperativa ya que la eliminación de antibióticos en el pienso les pone un estrés en su efectividad. Aunque mejoran la salud del ave, su efecto sobre la viabilidad total de la parvada es limitada.

Los metabolitos nutricionales, especialmente los logrados a través de varias fermentaciones, tienen un modo diferente de acción y en teoría, no se pueden agrupar en estas tres categorías anteriormente descritas. Por solo el hecho de haber sido doble fermentados con levaduras, una vez acabada la actividad de ellas por falta de sustrato, al morirse quedan sus subproductos encontrados en la paredes celulares (MOS, Beta Glucanos y Mananos).

Pero, cabe añadir que durante el proceso de fermentación se han logrado producir cientos de metabolitos los cuales trabajan en sinergia para ayudar a mejorar la salud y el bienestar del ave. Hay que recordar de que las aves se benefician de los metabolitos producidos por los microorganismos y no por la digestión de las bacterias en si. Los metabolitos apoyan el balance del sistema inmune, refuerzan la salud digestiva y ayudan no solo a eliminar patógenos sino también reducen la resistencia a los antibióticos desarrollada por varias bacterias debido al uso indiscriminado de ellos en la producción animal.

En conclusión, el desarrollo de la vellosidades y la microbioma intestinal es primordial en la absorción de los nutrientes necesarios para el rápido crecimiento del ave. El sistema inmune y el sistema digestivo se desarrolla a muy temprana edad.

El medio ambiente, la correcta formulación del pienso y la disminución de bacterias patógenas no solo aumenta la capacidad del ave de alcanzar su potencial genético, pero se debe de tener en cuenta que factores como viabilidad y uniformidad de la parvada son factores muy importantes para lograr ingresos competitivos y el crecimiento sostenible de la actividad avícola.

 

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