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Nos desplazamos hasta Montmajor, en la provincia de Barcelona, para visitar Ca l’Ignasi una explotación donde Agrogi ha instalado una nave, bajo un proyecto llave en mano, ejemplo de sostenibilidad y rentabilidad para el sector
En esta explotación familiar de larga tradición familiar encontramos tierras de cultivo, cerdos, vacas de carne, y avicultura, que se ha hecho un hueco ayudando de esta manera a sus gestores a diversificar sus producciones.
Durante muchos años, se plantearon la posibilidad de incorporar también avicultura, pero no se decidieron hasta que Carmen Parra disertó con su marido el nuevo proyecto.
A partir de este momento, se pusieron en contacto con la integradora y empezaron a gestionar todo el trámite burocrático. Desde GEPESA, del Grupo Vall Companys, realizaron una visita inicial donde inspeccionaron la localización de la futura explotación, estudiaron el terreno y sobre todo transmitieron a sus dueños el alto nivel de bioseguridad de la zona puesto que no hay granjas vecinas en bastante terreno alrededor.
Una vez que tenían la visión de la integradora y los permisos burocráticos para desarrollar la actividad, sólo les quedaba buscar quién les llevaría a cabo el proyecto de construcción de la nave.
Para poder decidirse sobre la empresa instaladora, preguntaron a vecinos de la zona, hablaron con amigos e incluso visitaron otras explotaciones avícolas.
Estudiamos y visitamos varias naves antes de decidirnos, pero todo cambió en una visita que hicimos a Belsierre en Huesca. La nave que había allí, instalada bajo un proyecto llave en mano también por AGROGI, era espectacular
La nueva nave, con unas dimensiones de 120×16 metros y ventilación túnel, es autosuficiente a nivel energético, funcionando en su totalidad por medio de la energía solar. Ramón y Carmen decidieron buscar alternativas y se decantaron por la instalación de placas solares en el tejado de la nave con baterías para el almacenamiento de la energía.
Para la iluminación de la nave se deciden por luces LED, que presentan mayor eficiencia energética (desperdiciando menos de un 5% en la generación de calor), además de no poseer elementos tóxicos como los fluorescentes. A su vez, los LEDs dan lugar a una mejor calidad de la distribución de la luz, teniendo una mayor vida útil.
Es importante resaltar el perfecto aislamiento térmico que le ofrece la nave instalada por AGROGI, con un remate excelente y cubierto en todas las juntas, además de un falso techo de 5cm que ofrece mayor poder de aislamiento y por lo tanto mayor eficiencia.
Llevamos unos 9 engordes con la nave instalada por AGROGI y estamos muy satisfechos. Es realmente rentable a nivel energético y productivo
Gestión ambiental con tecnología punta
Para la gestión ambiental de la nave, AGROGI ha instalado un autómata de control, que en palabras de Ramón, es fácil de gestionar, intuitivo y lo puedo consultar desde el móvil. Además, AGROGI nos ofrece asesoramiento y una ayuda remota si la necesitamos. Encontramos varias sondas repartidas interior de la nave y una cámara de vídeo en la zona central que les permite observar la nave desde casa para un mayor control.
En el momento de nuestra visita hay aproximadamente 34.500 pollos y se encuentran a los 26 días de engorde. Nos llama la atención el perfecto estado de la cama y la calidad del aire, a lo que Ramón nos comenta que la calidad del aire en la nave es fantástica. Los cálculos en cuanto a necesidades de la instalación están perfectamente hechos. La calidad de la cama es perfecta, encontrándose los pollos en muy buen estado.
Diseño de instalaciones y bioseguridad:Un binomio inseparable
Para el diseño de las instalaciones, AGROGI ha tenido en cuenta las demandas de estos jóvenes avicultores. Se ha llevado a cabo el vallado perimetral y la inclusión de: En la entrada de la explotación se sitúan los vestuarios para los cargadores de pollos en el que se cambian de ropa y zapatos, aumentando en nivel de bioseguridad y evitando la contaminación entre granjas.
Dentro de la nave encontramos una zona de vestuarios con ducha además de un cuarto de ducha seca que garantiza que antes de entrar en contacto con los animales te cambies de ropa y zapatos, una medida más para aumentar la bioseguridad. A lo largo de la instalación encontramos puertas en ambos laterales para la gestión de las bajas, evitando transitar por toda la superficie de la nave con las bajas. AGROGI tuvo en cuenta las necesidades del avicultor en cuanto al manejo. Encontramos una división de la nave en tres secciones:
Se ha instalado un portón lateral para el clareo de las hembras al ser trasladadas a matadero a los 33-34 días. En ese momento, los machos ocupan todo el espacio hasta los 42 días.
Ramón nos cuenta que cuando han tenido que realizar la limpieza y desinfección debido al vacío sanitario ha quedado muy satisfecho con la nave ofrecida por AGROGI, donde ha hecho hincapié en que los materiales son de alta calidad y de fácil limpieza y desinfección, agilizando el trabajo durante el vacío sanitario puesto que no hay esquinas o juntas que nos impidan una correcta limpieza.
En este proyecto confluyen los requisitos de la integradora, el manejo que desean los avicultores y la gran experiencia de AGROGI, conviertiendo a esta nave en un ejemplo de gestión, sostenibilidad y rentabilidad. Ramón y Carmen están muy contentos con su experiencia con AGROGI en este proyecto, y no dudarían en volver a contar con ellos cuando amplíen su explotación.
«Estamos muy contentos con AGROGI. En todo momento nos han ofrecido mucho asesoramiento y nos hemos sentido muy acompañados durante todo el proceso. Cuando empiezas y quieres ser competitivo lo mejor es rodearse de profesionales»