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La nueva explotación que Exafan ha entregado recientemente a la empresa ITALPOL, se trata de una granja destinada a la cría de pollo de engorde. Ubicada en Zuera, Zaragoza, tiene como peculiaridad que está provista de ventanas y captadores solares para que la iluminación sea natural.
Esta novedad ha representado una parte importante en el proyecto, donde Exafan ha apostado por implementar a esta nave las tendencias que provienen de los países del norte de Europa, en lo relativo a construcción de explotaciones de cría con iluminación natural.
Atendiendo a la definición de la nave y sus características constructivas, ésta cuenta con unas medidas de 120 m por 15 m, y está equipada con paneles tipo sandwich, garantizando su aislamiento completo, y por lo tanto, unas condiciones climáticas idóneas.
La ventilación aplicada es longitudinal, mientras que el sistema de refrigeración o “cooling” de alto rendimiento, mediante paneles evaporativos, cuenta con un doble pasillo exterior con vallado, que le ofrece una alta protección en bioseguridad, a la par que le provee de mayor efectividad.
El control de todos los factores que influyen en la climatización, así como la gestión y automatización de los sistemas de alimentación, sistemas de agua, las básculas de pesaje, etc. se realiza de forma sencilla y eficiente con el ordenador de control ambiental SCA.
La iluminación natural se consigue por medio de ventanas ubicadas en los laterales de la nave, como por captadores solares instalados en el techo, capaces de iluminar de forma eficiente una estancia no expuesta al exterior. Se componen de un captador solar exterior, de una superficie especular que transporta la luz a través de la cámara cerrada, situada entre la cubierta y el aislamiento, y de un difusor con el que conseguimos distribuir esa luz en una gran superficie y generar una gran sensación de confort para las aves.
Esta influencia en iluminación natural tiene como objetivo máximo que el comportamiento del ave sea lo más similar al que tendría en su hábitat natural, y obtener de esta manera el máximo rendimiento productivo del animal al estar en un ambiente de confort.
Al respecto de todo esto, la dirección de la compañía afirma “se ha conseguido un entorno muy adecuado, donde los animales viven como reyes”.
Atrás ha quedado un largo periodo de trabas burocráticas, tanto en la consecución del terreno como en el inicio de la actividad, superado gracias al esfuerzo y la perseverancia del responsable de la explotación, así como por el vínculo establecido desde el primer momento con el equipo de Exafan, que le ha apoyado en todo el trayecto.
Por ello, una empresa como Exafan está capacitada y cualificada para abordar la totalidad de un proyecto llave en mano desde su planteamiento inicial.
Actualmente, la primera crianza de ITALPOL ha sido valorada como su responsable señala “de sobresaliente”, y espera con satisfacción el resultado de una segunda que augura buenos resultados.