Salud Animal
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El Enterococcus cecorum es un patógeno emergente en la avicultura, presentando desafíos significativos para los productores en todo el mundo.
Esta bacteria puede causar infecciones graves, resultando en cojera, reducción en la tasa de crecimiento y aumento de la mortalidad, factores que impactan directamente en la rentabilidad y sostenibilidad de las granjas.
El Enterococcus cecorum se considera una bacteria comensal del tracto intestinal. Sin embargo, ciertas cepas de esta bacteria poseen genes de virulencia y han evolucionado para convertirse en patógenos significativos.
Estas cepas se diseminan rápidamente, causando infecciones sistémicas graves como osteomielitis, necrosis de la cabeza del fémur, espondilitis y septicemia. Esto lleva a problemas como cojera, bajo crecimiento y aumento de la mortalidad, creando desafíos considerables para los productores avícolas.
El problema de la translocación bacteriana
Diversos factores estresantes, como el ambiental y el nutricional, conducen a desequilibrios en la microbiota intestinal y, en consecuencia, a la proliferación excesiva de bacterias patógenas.
Además, factores como micotoxinas, estrés térmico, desequilibrios nutricionales y procesos inflamatorios debido a infecciones simultáneas comprometen la integridad intestinal, permitiendo que bacterias como Staphylococcus, E. coli y Enterococcus atraviesen la mucosa intestinal, pudiendo llegar a la corriente sanguínea; este proceso es conocido como translocación bacteriana.
Una bacteria intestinal que ha ganado relevancia debido a lesiones específicas en el sistema articular es el Enterococcus cecorum.
Abordar el E. cecorum es crucial para mantener la salud, el rendimiento y la rentabilidad de las aves. Afortunadamente, las investigaciones en curso buscan profundizar nuestro conocimiento sobre el comportamiento del E. cecorum y desarrollar estrategias nutricionales dirigidas para la prevención y el tratamiento.
Tres líneas de defensa
Adisseo aborda este desafío concentrándose en la optimización de la salud y la integridad intestinal. Este enfoque se basa en tres líneas de defensa:
Al priorizar estos aspectos, Adisseo busca aumentar la resistencia natural de las aves, garantizando el control de patógenos y el rendimiento.
Construcción de un microbioma resiliente
Los probióticos son microorganismos beneficiosos que, cuando se administran en cantidades adecuadas, promueven la salud del huésped.
El Bacillus subtilis es una especie probiótica comúnmente utilizada en la nutrición de aves.
El Alterion®, probiótico desarrollado por Adisseo, se basa en una cepa exclusiva de B. subtilis (Bacillus subtilis 29784) que produce metabolitos especiales, confiriendo propiedades únicas de apoyo a la salud intestinal.
Promueve la salud intestinal al ayudar al crecimiento de bacterias beneficiosas, al mismo tiempo que ayuda a controlar patógenos potencialmente dañinos.
Para evaluar el efecto de Alterion® frente a este desafío, el producto fue aplicado en una granja comercial en Francia, donde todos los pollos de engorde dieron positivo para E. cecorum. Los resultados mostraron una reducción significativa de la presencia de E. cecorum en el ciego con la suplementación de Alterion®.
Además, se observó un aumento en la proporción de Firmicutes sobre Proteobacteria, lo que indica una modulación positiva de la microbiota.
Aún más, los resultados demostraron un aumento significativo de Actinobacteria, lo que significa que bacterias como Bifidobacterium (que confieren beneficios positivos a la salud) también aumentaron.
Con esta acción de equilibrar la microbiota intestinal, se pudo observar mejoras relacionadas con la salud y el rendimiento, resultando en una menor incidencia de lesiones por pododermatitis, mejor rendimiento y productividad (Tabla 1).
Tabla 1. Efecto del Alterion® en el equilibrio de la microbiota, en la incidencia de pododermatitis (FPD) y en el rendimiento en pollos de engorde.
Otro componente estratégico para el mantenimiento de la salud intestinal de las aves es el ácido láurico, un ácido graso de cadena media reconocido por sus potentes propiedades antimicrobianas contra patógenos intestinales.
El ácido láurico desestabiliza la membrana celular de diversos patógenos, incluyendo bacterias y virus, inhibiendo efectivamente su crecimiento y proliferación en el tracto intestinal.
Un microbioma bien equilibrado está asociado con la activación y estimulación del desarrollo del sistema inmunológico intestinal.
Además, el propio ácido láurico es conocido por sus propiedades inmunomoduladoras, particularmente en el intestino.
Para enfrentar los desafíos más importantes para la salud intestinal, Adisseo ha desarrollado FRA® C12, un producto innovador compuesto de monoglicérido de ácido alfa-láurico, resultado de años de cuidadosa investigación y desarrollo.
FRA® C12 está formulado específicamente para liberar sus componentes activos en el tracto gastrointestinal de las aves, donde los patógenos frecuentemente se proliferan y representan riesgos para la salud.
El efecto de FRA® C12 fue demostrado en un ensayo ex vivo que involucró a 100 pollos de engorde (Figura 1). Las aves recibieron una dieta control o una dieta suplementada con FRA® C12.
Después de 28 días, se recolectaron y analizaron fluidos digestivos del proventrículo, íleon y ciego para evaluar la actividad contra el Enterococcus. Los resultados sugieren que la adición de FRA® C12 a la dieta de los animales es capaz de inhibir el desarrollo de E. faecalis en diferentes partes del tracto gastrointestinal.
Fortalecimiento de la barrera intestinal
Establecer estrategias para mejorar la integridad intestinal es esencial para el control de la translocación bacteriana. Aumentar la expresión de las uniones estrechas y reducir la inflamación intestinal son la clave para fortalecer la barrera intestinal.
En el estudio publicado en Frontiers in Immunology (Rhayat et al., 2019), observamos mediante la metodología de inmunofluorescencia un aumento en la expresión de ocludina y ZO-1 con la presencia del Alterion®.
Además, observamos que un proceso inflamatorio disminuye drásticamente los niveles de estas uniones estrechas. Posteriormente, al incluir Alterion® junto con el estímulo inflamatorio (IFN-γ y TNF-α) vimos una recuperación de la expresión de ocludina y ZO-1.
Otro componente crucial para el apoyo a la salud intestinal es el butirato, un ácido graso de cadena corta conocido por sus efectos positivos en la reepitelización y desarrollo de la mucosa intestinal.
El ácido butírico sirve como fuente de energía para los enterocitos y desempeña un papel vital en el mantenimiento de la integridad intestinal.
Sin embargo, cuando se administra en su forma no protegida, el butirato es rápidamente absorbido en el tracto gastrointestinal superior, lo que limita sus efectos beneficiosos en las regiones distales del intestino.
Para enfrentar este problema, Adisseo ha desarrollado formulaciones innovadoras de fuentes de ácido butírico, incluyendo el butirato de sodio protegido de liberación precisa, el Adimix® Precision, y glicerídeos de ácido butírico, como el FRA® Butyrin Hybrid.
Estas formulaciones están diseñadas para liberar el butirato en el tracto intestinal, donde puede ejercer sus efectos beneficiosos en la salud intestinal de manera más eficaz.
Enfoque personalizado
Adisseo no recomienda simplemente el uso de todos los suplementos alimenticios en casos de E. cecorum u otros patógenos.
Nuestra experiencia reside en la selección ideal de un aditivo (o una combinación de aditivos) basada en un diagnóstico completo de su granja. Evaluamos las condiciones de sus instalaciones, entendemos sus objetivos y priorizamos sus preocupaciones específicas.
Conclusiones
La filosofía central de Adisseo es mejorar la resiliencia de sus animales, permitiéndoles resistir diversos desafíos de la producción. Nuestra investigación e innovación están completamente enfocadas en este objetivo.
Tanto la práctica como la literatura demuestran claramente que soluciones probióticas, como el Alterion®, así como productos a base de ácidos grasos de cadena corta (Adimix® Precision y FRA® Butyrin) y media (FRA® C12), pueden contribuir a una barrera intestinal más fuerte en las aves. Esto les permite mantener su resistencia natural y enfrentar patógenos como el E. cecorum.