Disponer de una veranda cubierta o jardín de invierno también es beneficioso, ya que proporciona un “ambiente exterior controlado”, de transición, muy bien valorado por los animales.
Implicaciones en el bienestar animal de las producciones alternativas
En el marco del aviFORUM-PUESTA 2022, Aida Xercavins Simó ofrece a los asistentes una ponencia bajo el título «Implicaciones en el bienestar animal de las producciones alternativas»
En el marco del aviFORUM-PUESTA 2022, Aida Xercavins Simó ofrece a los asistentes una ponencia bajo el título «Implicaciones en el bienestar animal de las producciones alternativas»
Los sistemas de producciones alternativas tienen un gran potencial para contribuir al bienestar de las gallinas de puesta, pero también pueden estar vinculados a implicaciones negativas que deben tenerse en cuenta.
Cuando definimos el concepto de bienestar animal, normalmente hablamos de tres enfoques interrelacionados entre sí que ponen de manifiesto su carácter multidimensional.
Estos enfoques son prerrequisitos que se complementan, por lo que decimos que se alcanza un buen bienestar animal cuando:
- existe un correcto funcionamiento fisiológico del organismo (buena salud y estado físico),
- la posibilidad de realizar conductas naturales importantes para la especie en un entorno adecuado, y
- un estado emocional positivo (ausencia de emociones negativas como el miedo o el dolor, y presencia de emociones positivas).
Los sistemas de producciones alternativas nos ayudan especialmente a cumplir con las condiciones del segundo enfoque de la definición: ofrecer un entorno adecuado que permita realizar conductas naturales importantes para la especie de forma satisfactoria
Dentro del repertorio de conductas de una especie, algunas son especialmente importantes y las definimos como necesidades de conducta.
- En gallinas ponedoras, es una necesidad de conducta explorar y buscar alimento (foraging en inglés), así como la conducta de nidificación antes de la puesta del huevo, los baños de arena y otros comportamientos de confort como el acicalamiento.
- Cuando los animales no pueden realizar estas conductas es cuando aparecen conductas mal-adaptativas como por ejemplo estereotipias, falsos baños de arena o picaje.
Normalmente los producciones alternativas ofrecen a las gallinas la oportunidad de expresar estas conductas de manera más satisfactoria, pero para ello es importante asegurarse de que las condiciones del entorno son las adecuadas:
- Ofrecer yacija en buenas condiciones (que no esté apelmazada o húmeda) para que las gallinas puedan hacer baños de arena satisfactorios y no se aumente el riesgo de problemas podales.
- Ofrecer enriquecimiento ambiental para que los animales lo manipulen o para ofrecer un ambiente más interesante (por ejemplo: pacas de heno, bloques minerales, luz natural, cuerdas u otros elementos colgantes, etc.). Si el enriquecimiento tiene base comestible, se incentivará su uso durante más tiempo.
Disponer de un parque exterior adecuado, con suficiente cobertura (artificial o natural) que incentive la exploración del exterior sin que las gallinas se sientan desprotegidas. Un indicador de un buen uso del exterior es observar si hay interacción obvia (presencia de heces, destrucción de la cubierta vegetal alrededor de la nave o evidencias de baños de arena), más allá de 7 metros desde las trampillas de salida.
Cuando se dispone de jardín de invierno se provee de protección adicional y se ofrece un espacio extra con material de cama y luz natural donde forrajear, que también incentiva el uso del parque exterior y puede mantenerse abierto incluso en situaciones de confinamiento por influenza aviar (IA) si está bien construido. Incluso puede ser muy interesante para producciones de huevo de código 2 y naves de recría.
Mantener el parque exterior en buenas condiciones no sólo tiene beneficios etológicos.
- En un estudio piloto se observó que en parques exteriores con poca cobertura (menos del 5% de árboles y arbustos), había más aves de alto riesgo de transmisión de influenza aviar (es decir, aves migratorias acuáticas) en comparación con parques con mayor cobertura.
- De igual modo, se observaron más aves de alto riesgo en parques que estaban rodeados por zonas de campos abiertos, en comparación con parques rodeados de zonas más protegidas.
- Aunque debe seguir investigándose al respecto, estos resultados son prometedores y respaldan la idea de que los parques exteriores tienen que ser lugares con buena cobertura para que los animales los usen sintiéndose seguros de los depredadores y las inclemencias del tiempo.
- Que las gallinas usen el espacio exterior es positivo principalmente porque les permite manifestar plenamente la conducta de exploración y búsqueda de alimento, y disminuye la densidad animal dentro de la nave. Ambas cosas ayudan a prevenir la aparición de picaje en el lote.
El picaje sigue siendo uno de los principales problemas de bienestar animal en gallinas ponedoras.
- Se trata de una conducta anormal, donde en vez de picotear el suelo se picotea otra ave (conducta redirigida).
- Es importante diferenciar la pérdida de plumas causada por el picaje de la pérdida de plumas causada por agresividad, pues las causas y consecuencias son distintas.
- El picoteo agresivo es una conducta social negativa que se realiza para establecer jerarquías, y va dirigida hacia la cabeza y la cresta del animal.
- Así, las heridas en la cresta o falta de plumaje detrás de la cabeza son indicadores de agresividad y nos advierten que quizá hay competencia por algún recurso.
- En cambio, la falta de pluma en la zona del cuello, espalda, grupa o cloaca del animal es un indicador de picaje.
El daño en la quilla
Sin embargo, hay otros problemas de salud que también tienen un gran impacto en el bienestar animal en los sistemas de producciones alternativas. La presencia de daño en la quilla (desviaciones o fracturas) es un problema de salud y bienestar que está captando mucha atención por su alarmante prevalencia.
- El daño en la quilla es de origen multifactorial, y puede estar relacionado tanto con problemas de descalcificación ósea, como fracturas a causa de colisiones o mal diseño de los aseladeros.
- En sistemas alternativos hay más riesgo de fracturas en la quilla, y es importante evitarlo porque son dolorosas (dolor agudo y crónico) y disminuyen la productividad y permanencia de los animales.
Para evitar el daño en la quilla, además de una nutrición adecuada, es esencial que se haga una buena recría para que los animales tengan huesos fuertes y se muevan por el sistema sin lesionarse.
- Cuando se da acceso temprano a aseladeros y rampas, esto ayuda a mejorar la movilidad de los animales en el sistema y mantener una buena salud ósea, especialmente cuando los comederos y bebederos están a distintos niveles del sistema, hecho que también incrementa la actividad de los animales y resulta en un mejor desarrollo óseo.
- En gallinas adultas (naves de puesta) también es muy importante intentar mejorar el movimiento en vertical dentro del sistema, ya sea mediante rampas, plataformas o aseladeros colocados a diferentes alturas.
- Una iluminación suficiente y uniforme permite movimientos precisos y ayuda a evitar colisiones.
- Otro factor a considerar son los ataques de pánico en el lote, que desencadenan movimientos bruscos en grandes grupos de animales y pueden resultar en lesiones, fracturas y asfixias
La asfixia por amontonamiento
La asfixia por amontonamiento (ya sea recurrente o por ataques de pánico) es otra implicación negativa que se da a menudo en sistemas alternativos.
Para evitarla se debe intentar reducir el estrés y miedo de los animales en todos los ámbitos.
- Se recomienda evitar cambios súbitos (especialmente ruidos), mantener una iluminación y ambiente uniformes, evitar dentro de lo posible los ataques de depredadores y maximizar los contactos positivos con las personas (por ejemplo, entrar en las naves con movimientos calmados y predecibles).
- Además, puede ser útil acostumbrar a los animales a que gradualmente las personas entren con ropa de distintos colores, en diferentes direcciones y momentos del día, pero evitando cambios súbitos en las rutinas de la granja.