CONCEPTUALIZAR Y DESMITIFICAR LA INNOVACIÓN
El término Innovación está cada vez más presente en el entorno corporativo, siendo motivo de discusión en eventos externos, objeto de consultorías y tema recurrente en las reuniones internas de las empresas.
Un concepto que antes estaba muy ligado a las empresas de computación, automatización y alta tecnología, hoy en día, en tiempos de altísima competitividad, velocidad en los cambios y transformación digital, es un tema relevante para las compañías que operan en cualquier tipo de negocio.
Esto ocurre porque los beneficios que se esperan de la implantación de la gestión de innovación en una empresa pueden ser de diversa índole:
Mayor eficiencia operacional, con reducción de costos o disminución de los tiempos de prestación de servicios.
Valor agregado al cliente en los servicios que se brindan actualmente.
Expansión del negocio en líneas o mercados sin explotar.
Mejorar la toma de decisión, explorando la información como un activo organizacional.
Mantener la perpetuidad del negocio, afrontando proactivamente las innovaciones e iniciativas disruptivas del sector, entre otras.
A pesar del uso cotidiano del término Innovación, éste no tiene una comprensión clara y bien difundida y, frecuentemente se confunde con Invención o Creatividad. Ante esto, es imprescindible acudir a la literatura para dilucidar mejor el tema.
El Manual de Oslo (2018) define la innovación en un negocio como:
Una innovación comercial es un producto o proceso de negocios nuevos o mejorados (o una combinación de ambos) que difiere significativamente de los productos o procesos comerciales anteriores de la empresa, y que ha sido introducido en el mercado o puesto en uso por la empresa. Para que una nueva idea, modelo, método o prototipo se considere una innovación, debe implementarse. La implementación requiere que las organizaciones realicen esfuerzos sistemáticos para garantizar que la innovación sea accesible para los usuarios potenciales, ya sea para los propios procesos y procedimientos de la organización.
Este concepto aclara una confusión común entre innovación e invención. Según Bittencourt:
Existen diversas etapas a ser cumplidas entre una invención y una innovación. Este proceso de transformación pasa por varias áreas funcionales de la organización, como por ejemplo investigación y desarrollo, logística, compras y producción, antes de que el nuevo producto esté disponible en el mercado o sea de uso comercial, (2017).
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