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Mejorar la ventana de nacimiento podría implicar una mayor uniformidad de pollitos de un día de vida, una mayor calidad y un mejor rendimiento después del nacimiento.
Por este motivo, hemos recopilado algunos consejos clave basados en el estudio del comportamiento de la gallina que pueden ayudar a reducir la ventana de nacimiento y mejorar el rendimiento de sus pollitos.
Restauración de huevos
Almacenar huevos más de 7 días produce una disminución en la incubabilidad.
Los huevos almacenados presentarán una mayor tasa de mortalidad embrionaria entre el primer y el tercer día de incubación y requerirán más horas para completar el ciclo de incubación. Cuando esto sucede, deben rechazarse algunos pollitos vivos en el nacimiento porque nacen demasiado tarde para ser viables. O bien estos pollitos recién nacidos no están lo suficientemente maduros para ir a las granjas y tendrán complicaciones para sobrevivir o crecer de manera óptima.
Cuanto más amplia sea la ventana de nacimiento, mayor será el problema. Incluso cuando los huevos se almacenan durante períodos más cortos, pueden haber estado sujetos a condiciones diferentes en la granja o pueden mezclarse con huevos de otro lote para completar y cargar las máquinas.
Para reducir la ventana de nacimiento, debe llevar los huevos almacenados durante largos periodos a una etapa más uniforme de desarrollo embrionario temprano antes de que comience la incubación. Cuando los huevos se almacenan durante un corto período de tiempo, también será beneficioso restaurarlos. La variabilidad se reducirá.
Restaurar la incubabilidad de los huevos almacenados e incluso mejorar la uniformidad de pollitos de un día de vida es posible mediante la aplicación de un tratamiento térmico antes de la incubación.
Sin embargo, resulta crucial controlar con precisión los parámetros clave de la incubación.
Para conseguir beneficios consistentes, debe medir y controlar con precisión la temperatura de la cáscara de los huevos en la incubadora, así como controlar y uniformizar las fases de calentamiento y enfriamiento de los huevos.
Carga equilibrada térmicamente
La mezcla de lotes es bastante común en las incubadoras modernas y a gran escala. Sin embargo, necesita cargar las máquinas con un patrón que busque el mayor equilibrio y uniformidad posible. Entender la distribución del flujo de aire en las incubadoras resulta fundamental para lograr una mayor uniformidad térmica y reducir la ventana de nacimiento.
Resumiendo, debe cargar las incubadoras en función de la distribución del flujo de aire en combinación con la producción de calor metabólico de los embriones.
Por ejemplo, para una configuración de máquina con ventilador de mezcla central y elementos de enfriamiento/calefacción, coloque los lotes con mayor fertilidad o huevos más grandes (aquellos que producen más calor) en la posición más cercana al pulsador para una mejor disipación del calor.
Los carros con huevos con menor producción de calor (con menor fertilidad, por ejemplo) deben colocarse en el centro de la incubadora, mientras que los huevos de producción de calor intermedio deben estar cerca de las paredes de la incubadora.
La consecuencia de una máquina desequilibrada térmicamente es una mayor variación y una ventana de nacimiento más amplia.
Se debe prestar atención al equilibrio térmico, no solo durante los primeros 18 días de incubación, sino también durante la fase de nacimiento. Resulta de vital importancia que transfiera los carros a la nacedora considerando la producción de calor metabólico y los asigne de forma adecuada.
Interacción activa embrión/entorno durante el nacimiento
Lo ideal sería transferir los huevos de la incubadora a la nacedora en torno a los 18 días. Por alguna razón, puede ser necesario llevar a cabo la transferencia en otro momento y, por lo tanto, el embrión puede haber pasado a una etapa diferente de desarrollo y puede necesitar condiciones adecuadas alrededor de los huevos para avanzar hacia el nacimiento (Gráfico 1).
En el siguiente gráfico se puede ver cómo evoluciona la temperatura del embrión a lo largo de las diferentes etapas del proceso de incubación: actividad vascular (sangre que fluye a la membrana externa) (1), posición del pollito (2), picaje interno (3) y picaje externo (4):
Por ejemplo, dependiendo del momento de la transferencia, es necesario ajustar otra temperatura del aire en la nacedora.
Para iniciar la fase de nacimiento en las mejores condiciones, también resulta importante identificar los períodos en los que el embrión es muy sensible a los estímulos ambientales. Synchro-Hatch™ se encargará por usted de controlar la temperatura y los estímulos de CO₂ detectando el momento biológico adecuado para ayudar a los embriones en los últimos pasos antes de que eclosionen.
El siguiente gráfico simplificado muestra las principales posibilidades de interacción entre el medioambiente y el embrión:
Por ejemplo, cuando el embrión se encuentra en un período de ahorro de energía, la temperatura del aire debe reducirse en consecuencia. Del mismo modo, determinados niveles de CO₂ aplicados en el período y magnitud correctos no causarán ningún daño, sino que provocarán que el embrión responda de forma natural al picaje interno y externo.
Con un buen manejo de la incubadora y control de estos tres elementos clave que influyen en el proceso de incubación y nacimiento, es posible reducir la ventana de nacimiento y maximizar sus beneficios.
En resumen
Restauración de los huevos durante el almacenamiento: llevar a los embriones a un estado de desarrollo más uniforme antes de que comience la incubación.
Carga equilibrada térmicamente: aprovechar la ventaja de conocer el flujo de aire de las máquinas y emplearlo para minimizar las diferencias existentes en la producción de calor cuando se mezclan lotes.
Interacción embrión/entorno durante el nacimiento: controlar el momento biológico correcto para ayudar a los embriones con estímulos positivos de temperatura y CO₂ durante el nacimiento.