Según la información de la que se dispone y para garantizar una elevada protección de la salud humana, los Servicios de la Comisión consideran que deberán tomarse las siguientes medidas en lo relativo a los productos procesados:
Sin problemas con el fipronil… de momento
La crisis de huevos contaminados con fipronil que ha azotado a producciones de 17 países europeos, de momento, no se ha desarrollado en nuestro país pero no debemos relajarnos en los controles si queremos seguir “viéndolo de lejos”.
La crisis de huevos contaminados con fipronil que ha azotado a producciones de 17 países europeos, de momento, no se ha desarrollado en nuestro país pero no debemos relajarnos en los controles si queremos seguir “viéndolo de lejos”.
Cuando se empezaron a detectar partidas contaminadas con fipronil, muchos consumidores europeos corrieron raudos a buscar en internet qué era esa sustancia y porqué podía aparecer en su cesta de la compra.
El fipronil es un insecticida de amplio espectro que tiene prohibido su uso en aves de corral pero aprobado para gatos y perros. Se trata de un insecticida que produce efectos nocivos sobre el medioambiente y la salud humana.
Según la OMS, se trata de un pesticida «moderadamente» peligroso para el ser humano, aunque es muy complicado acabar contaminado debido a su ingesta. Además, para desarrollar problemas de salud en humanos se deben ingerir en torno a cien miligramos de la sustancia por kilo, algo equivalente a comerse cien huevos adulterados.
De momento, los huevos españoles están libres de sospecha ya que no se han distribuido desde nuestro país productos afectados. Asimismo, sólo hemos retirado dos partidas, una en el País Vasco y otra en Cataluña, que no se llegaron a comercializar.
Un sector fuerte que aplica con éxito sus controles
Que los huevos españoles se encuentren libre de sospecha por ahora, nos hace pensar que formamos parte de un sector con rigurosas normativas y controles sanitarios.
La crisis del fipronil, de la que nos hemos librado de momento, manifiesta que en nuestro país se aplican de manera exhaustiva y con éxito los controles, tanto los internos propios de cada explotación, como los llevados a cabo por la administración.
Estos controles nos hacen fuertes frente a la adversidad, puesto que verifican durante todo el año la calidad y la seguridad de los productos avícolas.
Al evitar de momento que los huevos españoles estén bajo sospecha, se espera un aumento de las exportaciones para paliar el descenso de la oferta por el bloqueo de al menos 138 explotaciones en cuatro países.
De los más de 1.000 millones de docenas de huevos que produce España, más del 20% ya se vende en el extranjero. A esto habrá que añadir un encarecimiento del producto. Al bajar la oferta más de lo que lo hará la demanda, el incremento está asegurado.
Por ello, no podemos relajarnos y dormirnos en la aplicación de controles, puesto que los resultados de la aplicación de los mismos nos hacen más fuertes y competitivos.
Además, según información ofrecida por PROPOLLO, el pasado siete de agosto los Servicios de la Comisión emitieron el siguiente mensaje, relativo a los productos procesados:
En caso de detectar un nivel de Fipronil en el alimento procesado que supere el límite legal de 0,005 mg/kg (teniendo en cuenta los cambios en la concentración debido al secado, la disolución, el tratamiento o la proporción relativa del ingrediente [huevo/carne de pollo] en el alimento procesado), el lote contaminado de alimento procesado deberá retirarse del mercado.
Todas las explotaciones en las que la(s) empresa(s) sospechosa(s) hayan realizado el tratamiento desde enero de 2017 se han identificado, se encuentran bloqueadas y únicamente se liberarán si las muestras demuestran que cumplen con el límite máximo de residuos. En caso de que la muestra sea no conforme, las explotaciones permanecerán bloqueadas y los huevos/carne de pollo serán retirados del mercado. Estos huevos/carne de pollo serán destruidos y no se podrán utilizar para producir alimentos. En caso de que el resultado de los análisis de los huevos/carne de pollo supere los 0,72 mg/kg (posibles riesgos agudos para la salud), los huevos/carne de pollo serán recuperados de los consumidores y se establecerá la trazabilidad de los productos procesados a partir de ellos para retirarlos del mercado.
Además, cabe destacar que, de conformidad con la legislación de la UE, cada operador económico tiene la obligación de garantizar que los ingredientes/materias primas utilizados para producir los alimentos cumplen con la legislación de la UE. Por lo tanto, el operador económico deberá garantizar que los huevos/ovoproductos/carne de pollo utilizados para producir los alimentos cumplen con los LMR de la UE para fipronil.
Por otra parte, con fecha 8 de agosto dieron traslado de la actualización de la información sobre el incidente con Fipronil en huevos de Países Bajos:
Informe preliminar de la situación y lista de códigos de huevos. El 3 de agosto de 2017, estuvieron disponibles todos los análisis de más de 180 explotaciones avícolas bloqueadas. El mismo día, la NVWA publicó en internet todas las explotaciones que habían revelado resultados positivos, para así proporcionarle al consumidor la posibilidad de comprobar los huevos que tenían en casa, si estaban contaminados con Fipronil o no. Esta lista se actualizará regularmente cuando las explotaciones sean liberadas o si se encuentran otras nuevas implicadas. El viernes 5 de agosto se añadieron algunas explotaciones nuevas a la lista, porque los encargados de estas explotaciones le notificaron a la NVWA que la empresa de servicios en cuestión había tratado sus explotaciones.