Crianza de precisión V: Influencias y vigilancias

Durante la crianza de las aves pueden surgir cambios ambientales que si no se automatizan en el control de clima generen problemas en la temperatura del interior de la nave, el aumento de gases que desemboquen en problemas de respiración, pododermatitis, pérdida de apetito, de peso, entre otros.

Al menos debemos tener garantizado que nuestro ordenador de clima tenga las siguientes funciones y que estén correctamente programadas:

• Influencia en la seguridad fría cuando la temperatura en la nave es inferior a la deseada, de modo que el ordenador pueda, por sí mismo, reducir la ventilación y que se logre enfriar menos la nave.
• Influencia en la ventilación en caso de variación en la temperatura exterior. De esta manera, el ordenador de clima aumenta o reduce la ventilación de forma automática para evitar introducir aire caliente o frío en la nave.
• Influencia en la ventilación cuando la calefacción está encendida, de forma que se puede retrasar la ventilación por exceso de temperatura provocada por la calefacción.
• Influencia en la ventilación en caso de variación en la humedad interior, de manera que se aumente la ventilación para lograr extraer la humedad relativa en el ambiente.
• Influencia en la ventilación en caso de aumento del CO2 y del nivel de amoníaco. Resulta indispensable aumentar la ventilación cuando los niveles de CO2 y de amoníaco son altos para evitar problemas de salud en el ave.

• Influencia de aumento de ventilación por horario para incrementar la ventilación en función de la hora del día. Este tipo de influencia es muy útil en algunas instalaciones, como por ejemplo los aviarios.
• Influencia en la calefacción en caso de aumento de la humedad, de manera que la calefacción pueda ponerse en funcionamiento antes para reducir la humedad en el interior de la nave.
• Influencia en la refrigeración en caso de aumento de la humedad, que permite evitar que se genere mayor humedad dentro de la nave.
• Influencia en entradas de aire en caso de temperatura exterior baja. Mediante esta influencia, se aumenta la depresión para que el aire frío exterior que entre lo haga con más velocidad hacía al techo y se caliente antes de caer sobre los animales.

Se debe revisar si nuestro ordenador de clima tiene este tipo de influencias y si son fáciles de programar por el usuario.

El ordenador no sólo debe trabajar en ajustar por sí mismo la ventilación, calefacción, refrigeración y entradas de aire; sino, adicionalmente, es altamente necesario recibir alarmas de vigilancia para reducir costes y mantener el bienestar animal en nuestra nave.

Este tipo de alarmas nos avisan cuando el ordenador detecta que no se están cumpliendo los objetivos de consumo de alimento y de confort climático en los animales.

• Vigilancia de consumo de pienso y agua: marcamos unos consumos objetivos en función de una curva de alimentación y recibiremos una alarma en caso de no cumplir estas metas.
• Vigilancia de zona de confort: Nos permite ahorrar calefacción, ya que el offset de calefacción y de ventilación varían en función de la edad del pollo. Esto es útil durante toda la crianza, pero especialmente relevante cuando el animal está por emplumar el sistema activa zonas de confort.

La programación de estas variables llevan apenas unos minutos y su impacto es enorme durante todas las crianzas, ya que permiten al granjero alcanzar la crianza de precisión y cumplir con los objetivos de bienestar animal.

• Mejor ambiente en el interior de la nave.
• Mejor salud del animal al evitar problemas respiratorios y pododermatitis.
• Mayor AHORRO al evitar el exceso de gasto energético de calefacción, ventilación y refrigeración.
• Mayor control de alimentación y consumo de agua.
• Control remoto de todas las influencias y estadísticas ambientales de la granja.
• Mayor eficiencia en el control diario de su granja y, por lo tanto, menor trabajo.