La integridad del estado nutricional contribuye de manera significativa a proteger a las personas frente al contagio y durante cualquier tipo de proceso inflamatorio, incluida la infección por COVID-19.
¡El pollo contribuye a proteger a la población del Covid-19!
La carne de pollo aporta cantidades considerables nutrientes, constituyéndose en un alimento importante para el mantenimiento de un óptimo estado nutricional y de las defensas del organismo.
Desde el Centro de Información Nutricional de la Carne de Pollo, CINCAP, de Argentina se brinda recomendaciones a seguir durante la pandemia del COVID-19, tanto desde el aspecto nutricional como de la seguridad alimentaria vinculadas con el pollo.
- Por tanto, minerales como el hierro, zinc, manganeso, níquel, cobre y cobalto están íntimamente relacionados con la regulación de las defensas del organismo frente a la invasión de gérmenes patógenos. El selenio, por su parte, es un mineral indispensable para el sistema antioxidante humano, y su deficiencia podría predisponer a la infección viral.
- En lo referente a las vitaminas, es conocido el papel protector de la piel y mucosas que tienen la vitamina A, D, E, C, B6, B9 y B12, así como sus funciones de activación de células defensoras, entre otras.
La carne de pollo aporta cantidades considerables de cuatro de estos nutrientes –zinc, selenio, vitaminas B6 y B12, además de aportar cantidades variables de otros 143 micronutrientes. De esta manera, constituye un alimento importante para el mantenimiento de un óptimo estado nutricional y de las defensas del organismo.
¿Qué no debe faltar en nuestra dieta?
Es fundamental incorporar diariamente alimentos frescos como frutas, vegetales y carnes magras, como la carne de pollo.
En Argentina, la producción avícola no se detiene, de manera de garantizar el suministro de carne de pollo a la población.
La carne de pollo ofrece la gran ventaja de poder conservarse en freezer durante tiempo prolongado (12 meses en el caso del pollo entero y 9 meses, el pollo trozado), de manera que podemos comprar y freezar.
Además, es una fuente de proteínas económicamente accesible, altamente versátil y rendidora, por lo que es muy sencillo elaborar variedad de comidas ricas y nutritivas con ésta.
¿Existe contagio del corononavirus a través de los alimentos?
En la publicación del CINCAP, se explica que la transmisión del SARS-CoV-2 a las personas desde superficies u objetos contaminados con el mismo no ha sido documentada. Hasta el momento, NO existe evidencia de que los alimentos o sus envases sean una fuente o ruta probable de transmisión del virus.
Cuidados en la manipulación y preparación de alimentos
Es importante seguir las pautas habituales de higiene en la cocina, que pueden resumirse en las “5 claves para la inocuidad de los alimentos”, de la Organización Mundial de la Salud: mantenga la limpieza, separe alimentos crudos y cocinados, cocine completamente los alimentos, manténgalos a temperaturas seguras, y use agua y materias primas seguras.
En el caso de la carne de pollo, las pautas de higiene fundamentales incluyen: inmediata y correcta conservación en frío (heladera o freezer); no lavar el pollo crudo para evitar que, a través de salpicaduras, sus microorganismos habituales se depositen sobre las superficies y objetos, y evitar así la contaminación cruzada; no utilizar los mismos elementos de cocina para manipular pollo crudo y preparaciones cocidas o listas para su consumo; y asegurar una óptima cocción, hasta que la carne tome color blanco uniforme, sin vestigios rosados, y sus jugos sean transparentes.
¿Antes de almacenar los alimentos es necesario desinfectar sus envases?
En este punto, el CINCAP, indica que no existe consenso sobre este punto. Si se opta por desinfectar los envases para estar más seguro, es fundamental hacerlo exclusivamente con los productos indicados para ello por los expertos y seguir estrictamente las recomendaciones de protección personal -Tales como uso de guantes, ventilación apropiada, etc.- para evitar intoxicaciones o lesiones por mal uso de los productos.
La carne de pollo se puede conservar en su envase original, previo higienizarlo de la manera en que se lo hace habitualmente, pero no con desinfectantes, o bien en una bolsa apta para tal fin, correctamente rotulada.