Los reovirus aviares son patógenos importantes que cuentan con una amplia gama de patogenicidad. Aunque estos reovirus pueden llegar a ser detectados y aislados a partir de aves aparentemente sanas, también se asocian con diferentes formas de enfermedad, incluyendo síndrome de mala absorción, enanismo infeccioso (en inglés: Runting Stunting Syndrome o RSS), y otras. Sin embargo, su papel como patógenos primarios en estos síndromes clínicos no es siempre muy claro.
En contraste, la asociación de algunos de estos reovirus con artritis viral o tenosinovitis infecciosa es muy clara, especialmente cuando se trata de aislados de aves afectadas. Los brotes de enfermedad causada por reovirus han sido históricamente infrecuentes debido al uso cotidiano de programas de vacunación muy efectivos que incluyen vacunas a virus activo atenuado y vacunas a virus inactivado.
Dado que los reovirus son transmitidos tanto horizontal como verticalmente, la vacunación de las reproductoras es un paso crítico en el logro de la protección contra los desafíos de reovirus en el campo.
La vacunación de reproductoras pesadas con una combinación de vacunas a virus activo atenuado y vacunas a virus inactivado puede proteger contra la transmisión vertical y proporcionar así protección inmunológica pasiva a través de anticuerpos maternales para beneficio de la progenie, que será protegida desde una edad temprana contra desafíos de campo
Existen vacunas atenuadas disponibles para uso al día de edad en reproductoras y en pollos de engorde y algunas pueden ser utilizadas incluso in ovo. Las cepas vacunales comerciales disponibles incluyen S1133, 1733, 2408 y 2177 en los Estados Unidos. Estas cepas han sido utilizadas con éxito por décadas para controlar enfermedades asociadas a reovirus.
EN AUSENCIA DE UNA PROTECCIÓN SUFICIENTE, PUEDEN PRESENTARSE BROTES CLÍNICOS DANDO COMO RESULTADO -por mencionar solo algunos efectos negativos derivados de la infección clínica con reovirus-
Disminución en el índice de nacimientos
Reducción de la fertilidad debido a la ruptura de los tendones en los machos reproductores
Cojeras tanto en reproductoras como en pollos de engorde
Disminución del crecimiento
Incremento en la tasa de conversión alimenticia
Problemas de uniformidad en pollos de engorde
Desde el año 2011 ha habido un resurgimiento del número de casos clínicos de tenosinovitis y cojeras en aves pesadas en muchos países. Aunque la mayoría de los casos se ha presentado en pollos y gallinas reproducto...