Cómo evitar la propagación de la Enfermedad de Newcastle: Bioseguridad

y sus síntomas incluyen:

• Inmovilidad.
• Depresión.
• Ingesta reducida de alimento/agua.
• Cáscaras anormalmente blandas.
• Diarrea de color amarillo verdoso.
• Bajada de producción de huevos en gallinas ponedoras.
• Dificultad respiratoria (bostezos, tos, estornudos, gorgoteo y estertores).
• Síntomas neurológicos (como temblores, falta de coordinación, alas del cuello torcidas, caídas y parálisis).

La enfermedad se transmite por contacto directo con los fluidos corporales de aves de corral infectadas, especialmente sus excrementos y secreciones respiratorias.

Cabe aclarar que también existen factores predisponentes en la transmisión de la enfermedad tales como; comercio internacional, la comercialización de aves vivas, rutas migratorias, aves silvestres.

Las aves afectadas eliminan el virus a través de secreciones corporales, especialmente por las heces (King, 1999), las cuales son la principal fuente de diseminación de cepas entéricas virulentas (Icochea, 2007). De igual forma la enfermedad de Newcastle (ND) también puede transmitirse indirectamente por personas y objetos que entran en contacto con aves de corral infectadas o sus secreciones (p. ej., heces).

Vehículos: Tanto los vehículos que ingresan a nuestras instalaciones como las personas que los condujeron, estos deben ser limpiados y desinfectados, ya que pueden actuar como propagadores de enfermedades. La limpieza tanto del interior como del exterior del coche es muy importante, se debe tener especial cuidado con las ruedas.

Equipo: Hay innumerables objetos que ingresan a nuestras instalaciones. Además de materias primas que ingresan nuestros proveedores, por lo que debemos ejercer un control estricto y esterilizar todos los artículos, asegurándonos de que todos sean desinfectados correctamente.

Ropa: Se debe minimizar el número de visitantes que acceden a nuestras instalaciones, sólo deben entrar las personas necesarias para el funcionamiento de la instalación.

Agua y alimento: La calidad microbiológica del agua tiene que ser alta, además se debe realizar una correcta limpieza y mantenimiento habitual a los comederos y nipples de las aves para evitar el riesgo de propagación de la enfermedad.

Según el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) el periodo de incubación de la Enfermedad de Newcastle es de 7 a 21 días, el virus se elimina durante todo el periodo de incubación en las etapas clínicas y también por un período limitado durante la convalecencia.

Algunas Aves Silvestres y Acuáticas pueden actuar como reservorios de patotipos lentogénicos del virus, los cuales al pasar a las aves de corral puede sufrir mutaciones que lo convierten en una enfermedad de alta virulencia.

Se ha demostrado que algunas Psitácidas pueden diseminar el virus hasta por un 1 año e introducirlo en parvadas de corral.

Controlar esta enfermedad requiere de la intervención de muchos profesionales de la salud humana y animal, en la actualidad, la enfermedad de Newcastle (ND) está controlada en Canadá, los Estados Unidos y algunos países de Europa occidental, siguiendo presente en partes de África, Asia y Sudamérica.

Es importante resaltar que como las aves salvajes a veces son portadoras del virus sin estar enfermas, puede haber brotes en cualquier lugar donde se críen aves.

Es de vital importancia mencionar que se puede disminuir el riesgo de propagación de Newcastle si se cuenta con un buen plan de bioseguridad.

La bioseguridad se refiere a todas las medidas tomadas para mantener las enfermedades y los patógenos que las transmiten (virus, bacterias, hongos, parásitos y otros microorganismos) lejos de las aves de corral, las propiedades y las personas.

Una buena bioseguridad ayuda a proteger a las aves de la enfermedad de Newcastle. No se debe permitir que las parvadas entren en contacto con aves domésticas de estado de salud desconocido, aves de compañía (en particular, psitácidos) y aves silvestres o asilvestradas (en particular, cormoranes, gaviotas y palomas).

Además, siempre que sea posible, los trabajadores deben evitar el contacto con las aves fuera de la granja. De igual forma, se debe tener en cuenta que las aves pueden enfermarse o morir por la exposición a unas pocas partículas virales invisibles. En un solo día, el virus puede multiplicarse e infectar a todas las aves de una explootación. La mejor manera de mantener saludables a sus aves de corral es con el refuerzo de la bioseguridad.

• Restringir el tráfico dentro y fuera de la explotación.
• Reforzar y revisar periódicamente el vallado perimetral de las instalaciones.
• Revisar el sistema de agua de la instalación en búsqueda de elementos dañados y reparar si es necesario para evitar que elementos o animales tengan acceso al mismo.
• Uso de pediluvios, rodaluvios y arcos de desinfección para desinfectar zapatos y ruedas de vehículos.
• Limpiar y desinfectar la ropa, manos, bandejas de huevos o pisos, cajas.
• Evitar las visitas a otras granjas.
• Lavarse las manos, limpiar y desinfectar las botas antes y después de ingresar a una explotación.
• Limpiar y desinfectar herramientas.
• Limpiar y desinfectar las instalaciones.
• Buscar signos de enfermedad.
• Reportar los casos de aves enfermas inmediatamente.

Para realizar una correcta limpieza y desinfección necesitamos los siguientes productos:

Limpieza:

Como bien es sabido, las explotaciones ganaderas son lugares donde se reúnen unas condiciones de alto contenido en materia orgánica, calor, humedad y alta densidad. Estas condiciones hacen a nuestras instalaciones el lugar óptimo para la proliferación de organismos patógenos. Por ello, es necesario llevar a cabo una correcta limpieza con un detergente alcalino capaz de arrastrar la materia orgánica que alberga microorganismos patógenos.

Para ello recomendamos el uso del detergente Clean Zix Espumante para realizar una correcta limpieza y desincrustación de la materia orgánica.

De esta manera se expondrán todas las partes de la granja para que los desinfectantes puedan actuar y alcanzar el mayor número de microorganismos presentes.

Desinfección:

Una vez realizada la limpieza, es el momento de combatir los microorganismos enfrentándonos a estos con productos del amplio espectro, con un mecanismo de acción inespecífico que evite la aparición de resistencias, que sean amables con los animales, el personal y con el medio ambiente.

Para ello, recomendamos los desinfectantes Virox (Monopersulfato potásico en forma de polvo) y Zix Virox (combinación sinérgica de peróxidos y acido peracético en forma líquida).

Estos productos cuentan con un mecanismo de acción por oxidación que es inespecífico, de amplio espectro y totalmente biodegradable. Zix Virox ha sido testeado frente a la Enfermedad de Newcastle al 1% en condiciones de alta suciedad UNE-EN 14675: 2015.

La Bioseguridad es de vital importancia para prevenir la propagación de la enfermedad. La desinfección de las personas, elementos, materias primas, animales e instalaciones es primordial y debe ser realizada con desinfectantes con eficacia probada contra la enfermedad de Newcastle como el Zix Virox, cuya eficacia ha sido testeada frente a ND al 1% en condiciones de altas suciedad UNE-EN 14675: 2015.

Si seguimos de forma exhaustiva y sin fallo las medidas de bioseguridad y prevención, no solo conseguiremos protegernos frente a Newcastle  y frente a otro tipo de enfermedades, sino que estas medidas actuarán de forma complementaria a otras medidas de bioseguridad que se estén implantando en los diferentes eslabones de la cadena productiva. Además, estaremos protegiendo de forma indirecta a la sociedad en general.

La clave del éxito es conseguir la implicación de todo el personal involucrado en la producción, todos deben estar concienciados de la importancia de la bioseguridad para poner todo el esfuerzo necesario en aplicar las medidas de manera efectiva, solo de esta manera se podrá prevenir la enfermedad y evitar la propagación del virus en animales y humanos.